Colonial ha encargado a varias entidades financieras la emisión de nuevos bonos por un importe de 500 millones de euros, con el objetivo de refinanciar su deuda y llevar a cabo la recompra de bonos existentes por un valor de 300 millones de euros.
Se trata de una nueva emisión a ocho años a colocar antes del próximo miércoles 14 de octubre, día en el que quedarán fijados todos los términos y condiciones de la operación.
Este martes, Colonial también ha ofrecido a los titulares de parte de su deuda la recompra de hasta 300 millones de euros, anunciado su intención de emitir más obligaciones denominadas en euros para captar más fondos.
Se trata de una oferta lanzada a los tenedores de los bonos de 500 millones de euros y de 600 millones de euros con un cupón del 2,728% y vencimiento en junio de 2023 y del 1,45% y vencimiento en octubre de 2023, respectivamente.
La socimi ha propuesto aceptar ofertas de venta de titulares de estos bonos hasta un importe máximo de 300 millones de euros entre ambas emisiones, sin perjuicio del derecho de la empresa a modificar este importe. La emisión de estos nuevos 500 millones de euros serviría, en parte, para llevar a cabo esta recompra de bonos.
Esta nueva emisión se enmarca dentro del programa que la compañía registró en diciembre de 2019 para emitir obligaciones denominadas en euros por un importe total de 5.000 millones de euros. Según Bloomberg, BNP Paribas, CaixaBank, Crédit Agricole CIB, Deutsche Bank y Natixis –como coordinador global–, han recibido el mandato para la operación.
DEUDA DE 4.600 MILLONES
La última vez que la socimi cotizada en el Ibex 35 recurrió al mercado para colocar bonos fue el pasado mes de mayo, cuando levantó 500 millones de euros de financiación mediante la colocación de una emisión de bonos a siete años realizada a través de su filial francesa Société Foncière Lyonnaise (SFL).
Colonial cerraba esta operación tras lograr en abril un préstamo sostenible por 200 millones, reforzando así su actual posición de liquidez de más de 2.480 millones para afrontar la crisis del coronavirus.
SFL registró en ese momento una demanda cuatro veces superior a la oferta de bonos, que finalmente se colocaron a un tipo de interés del 1,5% y entre una amplia base de inversores europeos, principalmente de Francia, Reino Unido y Alemania, con perfiles estables de compañías de seguros y fondos de inversión.
A cierre del pasado mes de junio, la firma de edificios de oficinas en renta presentaba una deuda neta de 4.644 millones de euros, de la que 2.600 millones correspondían a bonos emitidos por Colonial y otros 1.700 millones a bonos de su filial francesa Société Foncire Lyonnaise (SFL).