La Asociación Hipotecaria Española (AHE) ha constatado que los niveles de dudosidad se mantuvieron «razonablemente estables» en el segundo trimestre del año, pero ha advertido de que al finalizar las medidas de apoyo como las moratorias o los programas de avales públicos se producirá previsiblemente un deterioro sobre la calidad de las carteras crediticias ante la dificultad de algunos agentes de pagar con normalidad sus deudas.
Así lo ha puesto de manifiesto en el boletín del segundo trimestre de 2020, que refleja que la tasa de dudosidad del sector privado residente se situó en el 4,7%, lo que supone una disminución de 0,1 puntos porcentuales frente a marzo y de 0,7 puntos respecto al dato de un año antes.
En dicho periodo, el total del crédito vivo creció un 2,2% en términos trimestrales y un 3,8% en términos interanuales, hasta 1.241.445 millones de euros, mientras que el volumen de crédito dudoso se colocó en 57.965 millones de euros, un 1% más que en marzo y un 10,9% menos que en junio de 2019.
IMAGEN ERRÁTICA
La Asociación Hipotecaria ha apreciado una imagen «más errática» por sectores institucionales. En cuanto al segmento de hogares, la ratio de morosidad del crédito para la adquisición de vivienda se situó en el 3,5% (0,1 puntos por encima del trimestre anterior y 0,3 puntos por debajo de hace un año), con una caída del crédito del 0,5% en el trimestre y un aumento del 0,3% de los activos dudosos.
En cuanto al crédito al consumo, la tasa de dudosidad se situó en el 5,6% en junio, frente al 5% de marzo y el 4,6% del mismo mes de 2019. El saldo vivo del crédito a los hogares para adquisición de bienes de consumo cayó un 1,7% en el trimestre, mientras que el saldo dudoso de este segmento repuntó un 10,2% entre abril y junio.
El segmento de actividades productivas registró un mejor comportamiento que el de los hogares, al verse favorecido en buena parte por la introducción de los programas de avales públicos. Aunque, tras varios años de importantes avances, se ralentizó el saneamiento del crédito a las actividades inmobiliarias, su ratio de dudosidad cayó al 5,1% al cierre del segundo trimestre, frente al 7,2% de un año antes y el 5,2% de marzo.
LA CONSTRUCCIÓN MEJORA
De su lado, el crédito concedido al sector de la construcción mostró mejor desempeño que en el trimestre pasado, con una tasa del 9,8%, frente al 11,4% de marzo y el 12,7% de hace un año.
La AHE ha destacado que otras actividades que también ocupan un lugar reseñable en relación con el total de financiación concedida han manifestado un comportamiento «favorable», al haber crecido de forma importante en el trimestre sus volúmenes de crédito, que actúan como denominador en el coeficiente de dudosidad, por el apoyo de los programas de avales públicos.
De igual manera, la asociación ha valorado que las moratorias hipotecarias y no hipotecarias, dirigidas a trabajadores, colectivos vulnerables y recientemente ampliadas al sector turístico y al sector del transporte, han mitigado el impacto negativo a efectos contables de la cartera.
De hecho, al cierre de agosto se había concedido un total de 1,28 millones de solicitudes de moratoria, con un capital vivo de 48.991 millones de euros, aproximadamente un 7,4% del saldo del sistema.
«Gracias a todas estas medidas de apoyo, el impacto en la dudosidad del sistema no está siendo muy severo por el momento. Si bien, una vez que las mismas lleguen a su término, siempre y cuando no se refuercen con medidas adicionales, se espera que se produzca un deterioro sobre la calidad de las carteras crediticias ante la eventual dificultad de algunos agentes de atender y reembolsar con normalidad el pago de su deuda», ha advertido la Asociación Hipotecaria.