La explosión económica alrededor del 5G ya está aquí. Pese a la reticencia de cierta parte de la sociedad que vive bajo el ‘papel plata’, la evolución de conectividad móvil dibuja su nuevo mapa de poder. En lo que respecta a la generación de innovación y patentes, Huawei se posiciona como la más activa; las nórdicas Nokia y Ericsson como las que pueden generar más ‘royalties’ de uso; y la americana Qualcomm no quiere perder su poder en movilidad.
Ante este escenario, según indican fuentes del sector a MERCA2, se han alzado las armas de manera evidente para recoger el fruto sobre los últimos años de trabajo con el 5G. Y ninguna compañía quiere quedarse al margen. Qualcomm, Nokia y Ericsson tiene el viento a favor sobre el ecosistema de la conectividad gracias a las infraestructuras desarrolladas con otras generaciones de conectividad.
Es decir, pese a que Huawei se ha mostrado como el fabricante más ambicioso en la firma de patentes relacionadas con el 5G, los chinos han llegado relativamente tarde a la carrera de las redes. En este sentido, las nórdicas aprovechan que sus patentes de 5G entrelazan tecnología con el 3G y el 4G para desarrollar un ecosistema más completo a la hora de negociar contratos con proveedores y partner.
Por este motivo, aunque Huawei tenga un mayor número de SEP (patentes estándar esenciales) desarrolladas para el 5G, la monetización será más compleja. Algo parecido a lo que sucede a Samsung, que también es uno de los líderes en patentes otorgadas, aunque los coreanos sí empezaron antes en el desarrollo de redes.
HUAWEI Y SU FUERZA NEGOCIADORA
La fortaleza de Huawei en el ecosistema del 5G, tan solo ensombrecida por la guerra comercial entre China y EEUU que les tiene arrinconados como víctimas de la situación, está asumida por parte de toda la industria. No solo se trata de precio -que también-, sino de capacidad tecnológica. Pero a la hora de sacar réditos a las patentes las fuerzas se igualan, según señalan fuentes del sector a MERCA2.
No obstante, sin entrar en la pugna directa con la negociación de licencias, Huawei busca su particular redención gracias al abultado número de patentes, algo que le deberá servir para cuadrar las cifras si el segmento de la venta de teléfonos móviles se ve afectado por los problemas comerciales, a lo que hay que añadir el impacto sanitario relacionado con el covid-19 que, en este caso, afecta a todos los fabricantes por igual.
Desde la compañía china ya han llegado a plantear que la venta de patentes será un arma para generación de caja si los bloqueos de EEUU se hacen más profundos, o, en el mejor de los casos, no permiten ciertas negociaciones como el propio Huawei busca con Qualcomm. Así, con este condicionante, el entramado de patentes relacionado con el 5G podría verse afectado, y, teniendo en cuenta quién muestre interés por esas patentes, podría dar un giro la igualdad de fuerzas actual.
TENSIÓN AÑADIDA CON EL 5G
Junto a la propia dinámica enfrentada entre las grandes compañías tecnológicas, la situación de las patentes sobre el 5G también afecta a los diferentes verticales industriales. Por ejemplo, el sector de la automoción ultima cientos de acuerdos en materia de 5G para la conectividad de los vehículos, pero no consiguen que haya consenso.
Uno de los consorcios desarrollados, Avanci, mantiene su ritmo de desarrollo, pero aunar los intereses de compañías que son rivales, no siempre es sencillo. Y sobre todo cuando hay estrategias enfrentadas.