La conciliación de los autónomos ha sido siempre un tema espinoso, porque la realidad es que la gran mayoría de ellos trabajan más horas de las que serían recomendables, y lo hacen muchas veces por la dificultad que supone para ellos contratar a una persona que les ayuda en sus tareas. En la Comunidad de Madrid son conscientes de este problema y desde hace ya varios años tiene ayudas para facilitar que los autónomos puedan formar su equipo de trabajo a base de teletrabajadores.
De hecho, ahora que estamos en plena pandemia, el trabajo en esta modalidad es más recomendable que el trabajo presencial, y puede ayudar a los autónomos a ahorrar, al no tener que invertir en un local en el que ejercer su actividad ni en los correspondientes gastos de suministros, seguros, etc.
El número de autónomos que trabajan desde casa viene creciendo desde hace algunos años. Gracias a Internet la prestación de servicios de forma remota es ya algo habitual, por lo que muchas personas que deciden ponerse al frente de un negocio no necesitan buscar un establecimiento físico desde el que hacerlo. Si ahora además los autónomos tienen más facilidad para contratar teletrabajadores, muchos de ellos se animarán a ampliar el equipo de trabajo y tener así más tiempo para ellos mismos.
El teletrabajo está de moda
El trabajo en remoto es una modalidad que viene siendo usada por los autónomos desde hace ya unos años, pero que no terminaba de despegar en España. Sin embargo, la pandemia de Covid-19 ha cambiado esta situación y el número de teletrabajadores ha crecido de forma tan rápida que desde el Gobierno ya se está trabajando en una ley que regule esta cuestión.
Lo que está claro es que con la situación actual son muchos los empresarios que prefieren optar por los teletrabajadores. Además, en el caso concreto de los autónomos, tener más personas en su equipo de trabajo supone poder disfrutar de más tiempo libre. De ahí que la contratación de empleados en esta modalidad se considere como una medida de conciliación.
La Comunidad de Madrid destina 3,6 millones de euros para ayudar a los autónomos
El Programa para el Fomento de la Responsabilidad Social y la Conciliación Laboral, destinado a autónomos y pymes, ha estado en marcha desde 2018, pero recientemente ha vuelto a ser renovado.
En este caso se ha dotado al programa con casi 3,6 millones de euros destinados a promover medidas que puedan ayudar a autónomos y pequeños empresarios a conciliar mejor su vida profesional y personal.
Dado que muchas veces lo que más necesita el autónomo es poder delegar tareas, una de las medidas estrellas de este programa es la ayuda que recibirán los profesionales por cuenta propia por contratar teletrabajadores.
¿Cómo son las ayudas de Madrid para contratar teletrabajadores?
Los autónomos que ejerzan su actividad dentro de la Comunidad de Madrid recibirán hasta 2.500 euros por cada trabajador en remoto contratado, con un límite máximo de cuatro teletrabajadores.
La peculiaridad es que para recibir la ayuda puede contratarse a un nuevo trabajador o bien puede pasarse a teletrabajo a un empleado que ya estuviera al servicio del autónomo.
Además, también se ofrecen ayudas para aquellos contratos (sean o no de teletrabajo) que faciliten la flexibilización horaria. Pero en ningún caso el autónomo o la empresa podrá recibir más de 10.000 euros si combina las medidas de contratación de teletrabajadores y flexibilidad horaria.
¿Cómo se solicitan las ayudas de la Comunidad de Madrid para la contratación de teletrabajadores?
A ellas pueden acceder tanto los autónomos dados de alta en el RETA como las pequeñas y medianas empresas que tengan contratados entre uno y 250 trabajadores. Es imprescindible que el volumen de negocio anual no supere los 50 millones de euros o que el balance anual sea inferior a los 43 millones de euros.
Los beneficiarios deben llevar a cabo su actividad en la Comunidad de Madrid y estar al corriente de pago con sus obligaciones con la Seguridad Social, con la Agencia Tributaria y con la Administración de la Comunidad de Madrid.
Además, el acuerdo de teletrabajo o flexibilidad horaria no puede tener una duración inferior a un año.
La solicitud de la ayuda hay que presentarla en los tres meses siguientes a la fecha de acuerdo de teletrabajo o flexibilidad horaria.
Para poder acceder a la ayuda para la contratación de teletrabajadores o de flexibilidad horaria es necesario presentar el balance y la cuenta de resultados del ejercicio 2019, la vida laboral de la sociedad o el autónomo, escritura de constitución de la empresa e identificación de los trabajadores con los que se ha llegado al acuerdo para el teletrabajo o la flexiblidad horaria.
También hace falta el modelo que acredita el alta en Hacienda, documentos que confirmen que se está al corriente de pago con la Seguridad Social y con la Agencia Tributaria y el justificante de pago del último recibo del Impuesto de Actividades Económicas o, en su defecto, la declaración que acredita que la cifra de negocio es inferior a 1.000.000 de euros. Al tratarse de una ayuda vinculada a la contratación de trabajadores, también será imprescindible presentar el plan de prevención de riesgos laborales.
Otras ayudas para los autónomos
Aunque es habitual que las Administraciones Públicas pongan en marcha ayudas destinadas a autónomos y emprendedores, tras la llegada de la pandemia no son pocas las Comunidades Autónomas que han decidido aumentar su apoyo a estos profesionales. Uno de los casos es el de la Comunidad de Madrid, que ha incrementado en casi 2,6 millones de euros el presupuesto que tenía previsto inicialmente para este programa de ayuda a la conciliación.
Además, las ayudas no se limitan a estas que acabamos de comentar, también se incluyen subvenciones de hasta el 75% de los costes vinculados con la obtención de certificaciones o estándares relacionados con la responsabilidad social.
Con esta medida, aquellas iniciativas que promuevan la responsabilidad social pueden recibir hasta 2.500 euros por empresa o autónomo.
Se trata de apoyar a los autónomos en un momento difícil y, a la vez, ayudarles a conseguir el difícil equilibrio entre la vida profesional y la personal.