La piratería digital continúa haciendo estragos. Por culpa de esta tendencia cada año el Estado pierde 600 millones de euros que podrían ir a parar a sus arcas y afecta a 22.000 puestos de trabajo directos y 110.000 indirectos. Estos números se refieren solo a contenidos digitales y a nuestro país, pero las falsificaciones que se comercializan a través de la Red alcanzan cotas mucho más altas. La plataforma de ecommerce china Alibaba reconoció que el año pasado mediante su plataforma había hallado más de 1.910 casos de productos pirata, lo que supondría un montante de 66 millones de dólares.
Precisamente para proteger a las marcas de este tipo de violaciones a la propiedad intelectual nació hace poco más de tres años Red Points, una firma que dispone de una solución SaS en la nube que permite encontrar estas infracciones. Su solución monitoriza, detecta, reporta y elimina las vulneraciones y falsificaciones en Internet, trabajando para todo tipo de verticales. Una vez han firmado un acuerdo con un cliente, desarrollan una herramienta específica para él para hallar todas aquellas referencias en relación a su portfolio.
La startup acaba de anunciar una ronda de financiación de series B por valor de 10 millones de euros. La inyección de capital le dará la oportunidad de ampliar horizontes, aunque ya desde sus comienzos esta compañía miró hacia el exterior. “Desde que lanzamos la empresa en 2014 ya pensamos en global. Empezamos desde el minuto cero a vender fuera de España. Hoy el 95% de nuestras ventas son de fuera y son tanto empresas europeas como americanas”, explica para Merca2 la CEO de Red Points, Laura Urquizu.
La directiva apunta a 2016 como su año de explosión internacional, ya que desde su oficina de Barcelona vendieron a 70 marcas americanas. Eso marcó el camino que están a punto de tomar: la apertura de una sede física en EE.UU. “Para nosotros el mercado americano es muy potente porque la mitad de nuestros clientes están allí. Lo que queremos hacer ahora es abrir en Nueva York. La semana que viene me voy yo para arrancarla y tener un equipo de ventas allí con el objetivo de atacar el mercado americano de una manera mucho más fuerte”.
Cruzar el charco habría sido el lev motiv principal de esta ronda de inversión que ha sido liderada por la firma de capital riesgo europea Northzone. El grupo fue uno de los primeros inversores en Spotify y también ha apostado por otras startups tan reconocidas en el Viejo Continente como Wallapop, Lesara, CornerJob o iZettle. En la operación también han entrado inversores que ya apoyaron en su día a Red Point, como Mangrove y Sabadell Venture Capital, el vehículo de venture capital de Banco Sabadell.
¿Cómo funciona la tecnología?
Red Points desarrolla tecnologías personalizadas y flexibles para cada uno de sus clientes, basándose en el aprendizaje automático. Cuando un cliente cierra un contrato con la firma lo recibe un account manager que se encarga de definir los activos que se van a proteger, ya sean contenidos digitales o bienes físicos y, por supuesto, detallando las características del producto. “Todo se hace en base a keywords e imágenes. Construimos un algoritmo de búsqueda específico para cada marketplace o ecommerce que nos contrata. Tenemos cientos de ellos y entonces entran en funcionamiento”, detalla la responsable. “Depende del contrato que se firme, este algoritmo hace una pasada o dos pasadas y registra todas las vulnerabilidades que se hallan en una base de datos. El cliente tiene su propio dashboard o panel de control desde el que se ven todas sus vulneraciones y puede saber cuál se está identificando, cuál se está eliminando, etc”. La firma asegura contar con una tasa de efectividad del 96% en su herramienta.
Esta startup catalana que habría registrado un crecimiento de sus ingresos del 350% durante el año pasado trabaja principalmente con las marcas y los productores que quiere proteger su propiedad intelectual. En este momento cuentan con una cartera de 300 clientes de todo tipo, desde muy pequeños hasta muy grandes. Marcas como la startup de gafas de sol Hawkers, la productora de material de surf Santa Cruz o la editorial Condenast, entre muchas otras que no pueden decir, los contratan para velar por sus activos. También tienen acuerdos con ecommerce como Alibaba, eBay y son partners de YouTube. Actualmente sus clientes que más abundan proceden de verticales como la moda y los accesorios, el diseño de muebles, los deportes y también la industria juguetera, con algún que otro player importante proveniente del sector tecnológico.
Las empresas que confían en ellos son principalmente fabricantes de artículos físicos. “En este momento el 70% de nuestro portfolio son bienes de consumo que sufren el problema de la falsificación y el 30% es contenido digital. Pero a nosotros lo mismo nos da encontrar la falsificación de un producto que encontrar una vulneración o descarga ilegal de un contenido digital”, expresa. En cualquier caso la mandamás opina que es mucho más fácil encontrar el contenido digital en la Red. ¿La razón? ”Resulta más sencillo porque suelen poner el mismo título de la película, periódico o libro, solo que descargado ilegalmente, no entran en juego las características de los productos”.
La consejera delegada de Red Points cuenta que los países en los que su herramienta encuentra más falsificaciones de productos físicos a la venta online están ubicados en Asia en general y “en China en particular”. En el caso de los contenidos digitales hay más dispersión, con infracciones localizadas “en cualquier parte del mundo”.
España, ¿un país de piratas?
Teniendo en cuenta que Red Points es una startup española dedicada a erradicar la piratería no podíamos pasar sin preguntarla qué opina de los usuarios españoles en este sentido. Laura opina que en los últimos años sí que se ha notado cierto cambio en la mentalidad, aunque todavía queda mucho por hacer. “Para mí servicios como Spotify o Netflix ayudan mucho porque permiten que con cuotas muy económicas se pueda acceder a todo tipo de productos. No obstante, creo que el tema de la copia no autorizada del contenido digital es muy cultural, hay países que lo hacen más y países que lo hacen menos. La piratería por desgracia es un fenómeno muy extendido. Creo que estas plataformas si ayudan”, apostilla.
Para la CEO de Red Points el problema es más grave en el caso de las falsificaciones de productos físicos. “En el área bienes de consumo todo resulta mucho más difícil”, asegura. “La desgracia y lo peor es que muchos clientes compran un artículo sin saber que es falso. La mayor parte de las falsificaciones están en marketplaces tan conocidos como Amazon, Facebook, Alibaba, Aliexpress, eBay. Cualquiera puede colgar productos en estas plataformas. Cada día mandamos cientos de miles de requerimientos de eliminación. Cuando ven que nosotros representamos al legítimo propietario sí que los eliminan sin problemas”, afirma.
En diciembre desde Telefónica aseguraron que la piratería digital es “una lacra” y propusieron la limitación de la velocidad a aquellas páginas web que difundieran contenidos digitales copiados sin autorización. Desde Red Points se mostrarían a favor si finalmente se decidiese tomar esa medida. “Todo lo que sea proteger los contenidos digitales, los bienes culturales y proteger al dueño legítimo de un contenido o un producto en general es bueno”, defiende la responsable. “Hay mucho esfuerzo para proteger esto por parte de los stakeholders. Reino Unido le saca a España mucha ventaja en este sentido. Este tipo de problemáticas se pueden atajar con iniciativas de distinta índole y para nosotros cualquier propuesta es bienvenida”, concluye Urquizu.