La portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha asegurado que España es un «destino seguro» porque cuenta con uno de los «mejores» sistemas sanitarios del mundo y ha lanzado un mensaje de confianza al sector turístico asegurando que España «es un país solvente» para la inversión extranjera.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros celebrado este martes, Montero explicó que España, «al igual que el conjunto de países europeos desarrollados», está trabajando para transmitir a la comunidad internacional que los datos cualitativos son imprescindibles para analizar y ofrecer una información de calidad a los viajeros.
Montero manifestó su satisfacción por la negociación que se está llevando a cabo desde el Ministerio de Asuntos Exteriores español con el Reino Unido para establecer «corredores turísticos» seguros con las islas, después de que este país anunciase el lunes un cambio en su estrategia de recomendaciones de viaje en el marco del coronavirus.
La portavoz del Ejecutivo se mostró a favor de «regionalizar países», ya que considera «injusto» que se quiera homogeneizar la situación de todos los territorios españoles y volvió a lanzar un mensaje de confianza al conjunto de los turistas.
«Nada tiene que ver Canarias con otras comunidades autónomas», indicó Montero, quien aseguró que «es obvio» que la situación epidemiológica marca distancias entre distintos territorios y no tiene ningún sentido que algún viajero decida no venir a Canarias esta temporada por los datos que conozca de otras comunidades autónomas españolas.
La portavoz del Gobierno reiteró que España es un país solvente para la inversión extranjera y que de momento no se ha repercutido en el rating de la deuda soberana.
Montero indicó que en estos días están recibiendo visitas de entidades de calificación de deuda soberana e indicó que las primeras aproximaciones están siendo «muy positivas».
«Somos, también en este sentido, un país seguro, un país solvente de cara a la inversión extranjera. Y en ningún momento se ha repercutido por la situación de la pandemia y ojalá que tampoco en el futuro se tenga que repercutir», concluyó la portavoz del Gobierno.
SITUACIÓN DISTINTA A LA DE MARZO
Montero insistió en que, a pesar de que está aumentando el número de contagios de Covid-19, la situación es «distinta» a la que se vivió durante los meses de marzo o abril, ya que «gran parte» de los casos son asintomáticos y la edad media actual de los infectados se sitúa en torno a los 40 años.
Además, la también ministra de Hacienda destacó que en marzo la gran parte de los casos se diagnosticaba en los centros sanitarios porque ya presentaban síntomas, si bien ahora son los servicios sanitarios los que están detectando a estas personas, por lo que «no existe la misma presión asistencial» que la que ocurrió en los meses más duros de la pandemia.
«Ahora hay una actitud proactiva del servicio sanitario para controlar la enfermedad», ha apostillado, para señalar que el Gobierno sigue «preocupado y ocupado» en atajar la transmisión del coronavirus hasta que no exista la vacuna que permita combatir finalmente la enfermedad.