La vuelta de vacaciones deja un septiembre en el que se precipitan las decisiones en la aeronáutica española. La industria auxiliar mueve ficha ante los ajustes de su principal cliente: Airbus. El objetivo es pasar cuanto antes de la regulación temporal de empleo a la definitiva. En concreto Alestis y Aciturri aceleran los mecanismos de aplicación del ERE. Informaciones en el mismo sentido llegan de ITP Motores y, aunque sin comunicación oficial, Aernnova estaría inmersa en el mismo proceso.
UGT y CCOO rechazan la propuesta de ERE en su conjunto. El principio de acuerdo entre el Gobierno de España y el fabricante francés sellado a finales de julio y las ayudas previstas de Europa a un sector considerado “estratégico” avalan el carácter “coyuntural” de una crisis que no justificaría esta estrategia. Para los representantes de los trabajadores, Airbus no puede convertirse en la coartada de la industria auxiliar para la adopción de medidas unilaterales.
Alestis y Aciturri han formado las mesas de constitución de Expedientes de Regulación de Empleo (ERE), dando por amortizada la fase de los ERTEs. El proceso afectaría a 214 trabajadores en Aciturri, uno de los grandes suministradores de componentes de aeronaves con sede en Burgos, una vez acaben sus ERTEs en septiembre. Los ajustes se realizarían en los centros de Castilla y León, Madrid y País Vasco, si bien la empresa ya ha anunciado despidos en el resto de divisiones. En Alestis el impacto del ERE alcanzaría a 500 trabajadores.
Los fabricantes vascos de aeroestructuras Aernnova, por un lado, y de motores, ITP, por otro, anunciaron el pasado mes de julio 1.600 despidos en todo el mundo, de los que al menos 650 (Aernnova) serán en España. Y esto es sólo la consecuencia de una bajada en la producción de Airbus. De ahí la expectación del sector, que se lo juega todo a la baza del fabricante aeronáutico.
Y la inercia de los acontecimientos permite intuir un importante aumento de la lista de empresas que caerían por el efecto dominó de Airbus, con ajustes y cierres que se replicarían en diferentes zonas de España.
Por su parte Airbus también insistía, a finales de julio, en la necesidad de aplicar un ERE en la división Comercial, así como en Defensa y Espacio. Y la evolución de la secuencia está clara: en cuanto las grandes empresas se acogen a estos ajustes, los recortes en cascada en las pequeñas están asegurados.
UNA COYUNTURA PROLONGADA
Los sindicatos se oponen a decisiones definitivas para una situación que califican de “coyuntural”. El preacuerdo alcanzado a finales de julio entre el Ejecutivo español y la matriz de Airbus pone de manifiesto un compromiso firme para conservar la actividad de la industria y el empleo”, asegura en declaraciones a MERCA2, Juan Antonio Vázquez, secretario estatal del Sector Aeroespacial de UGT-Fica.
Las organizaciones sindicales se aferran al carácter provisional de la situación que sacude a Airbus, puesto que “fundamentalmente afecta a la aviación civil”, y pese admitir que se trata de un problema “prolongado”, aseguran que será temporal. “Las ayudas aprobadas por parte de Europa y el principio de acuerdo con el Ejecutivo español presentan el mejor contexto para negociar un plan estratégico y un plan de choque, que permitan acuerdos para mantener el conocimiento y la mano de obra cualificada, para que el sector pueda salir fortalecido”, manifiesta Vázquez.
En este sentido, tanto UGT como CCOO exigen “que el Gobierno reúna con carácter de urgencia una mesa sectorial donde estén representados los distintos ministerios competentes, los gobiernos locales, empresarios y sindicatos”, con el fin de abordar, mediante ambos planes -estratégico y de choque- la coyuntura económica actual.
Ante el paso adelante dado por la industria auxiliar que gira en torno a Airbus, “vamos a intensificar nuestra exigencia y el carácter inmediato de la convocatoria de esta mesa”, comenta el representante de UGT. Los empresarios se han precipitado al poner en marcha los mecanismos para la aprobación de EREs, “por eso vamos a reclamar con la misma premura que se acelere la negociación”.
INDUSTRIA AEROESPACIAL EN JUEGO
Más allá de la defensa y protección de los trabajadores de Airbus, la preocupación de las fuerzas sindicales se centra en el impacto que la reestructuración de Airbus tendrá en la industria auxiliar a nivel nacional.
Estas fuentes calculan que el sector genera 108.000 empleos en España y que supone el 0,77% del PIB español. “La industria auxiliar tiene poco músculo financiero y no podrá superar un envite de este tipo”. Por eso, el principal temor es que, con el tiempo, se sucedan los EREs en cadena.