Más que cualquier otra cosa, un huevo frito es un auténtico manjar. Su sabor, su textura, el color de su yema, un alimento tan simple, pero que provoca pequeños momentos de placer insuperables e incomparables. Pues muchas veces no hace falta darse homenajes a base de langosta y caviar para disfrutar de una buena cena a base de un buen par de huevos fritos.
Pero, ¿cuál es el secreto para la mejor preparación de un huevo con un poco de aceite? Pues, en realidad, aunque a priori parezca algo fácil y sencillo, también tiene sus trucos, sobre todo en la fritura, si quieres un huevo frito con puntilla, sin ella, a la plancha o algo más hecho. Sin embargo, muchos se preguntan cómo hacer un huevo frito sin engordar un gramo. Y, sí, esto es posible y te vamos a decir cómo desde Merca2.
1Huevo frito a la plancha que no engorda ni un poco
El huevo a la plancha es una de las formas de disfrutar de un buen huevo pero sin engordar nada. El truco está en poner tan solo una gota de aceite en una sartén pequeña y antiadherente y repartirla por toda la superficie, para que se quede impregnada y pueda cocinarse con el sabor de un buen aceite de oliva virgen extra. El resultado será un huevo cocinado gracias a la gota de aceite y al vapor que desprende cuando se ha calentado el aceite lo suficiente. Debemos poner una tapa para que se termine de hacer y ¡listo!