Creado hace casi diez años el bitcoin fue la primera moneda digital que empleó con éxito la criptografía para que las transacciones fueran seguras y ocultas. La evolución histórica de esta criptomoneda desde su nacimiento ha sido simplemente espectacular llegando a tener una revalorización superior al 1.500% en el último año.
No muy lejano queda cuando logró alcanzar sus primeros 1.000 dólares, de hecho fue el 1 de enero de este mismo año, como cuando llegó a superar el precio de la onza de oro, desatando una bandada de comentarios por parte de muchos analistas que se llevaban las manos a la cabeza esperando que este había alcanzado su límite.
Pero lo mejor para su evolución ha sido su estandarización, ya que a esta efusividad y alegría actual de aquellos que confiaron desde un primer momento en su precio, se suma el interés del inversor general, que ha ido modificando su idea sobre su inversión alcanzando perfiles muy diversos, incluyendo incluso a los más conservadores, que no se quieren quedar rezagados en este momento histórico. Sólo el tiempo determinará si será recordado como otros hechos históricos en la economía mundial, como fueron los tulipanes ,el boom inmobiliario o las puntocom, por poner varios ejemplos.
Sin embargo en la última semana ha tenido el respaldo del esperado debut en los mercados de futuros en Estados Unidos, lo que se ha interpretado en los mercados como un signo de fiabilidad y seguridad.
Estos nuevos futuros, con vencimiento en enero, llegaron a repuntar más de un 25% en su histórico debut, a pesar de haberse interrumpido su cotización hasta en dos ocasiones en cumplimiento del reglamento del CBOE. El primer parón, de dos minutos, se produjo cuando los derivados superaron el 10% de subida; y el segundo, de cinco minutos, cuando alcanzaron el 20%. Éste es sólo una de las normas con las que se pretende normalizar la inversión en bitcoin.
Al final terminó la jornada cotizando por encima de los 18.000 dólares, con el Bitcoin reaccionando al alza, conquistando nuevos máximos históricos sobre los 16.400 dólares. Eso sí, los contratos negociados apenas superaron los 50 millones de dólares en total durante las primeras horas, muy lejos de los más de 3.000 millones que movieron los futuros sobre el cobre.
A diferencia de la energía, los cereales, los minerales o las acciones de una compañía cotizada, el bitcoin no está asociado a un producto físico o al rendimiento de una empresa. Tampoco es una moneda que cuenta con el respaldo de un banco central o una economía. Es un activo que existe en una red formada por servidores electrónicos.
Pero tras este hito histórico veremos también que se podrán contratar futuros de bitcoin a partir del 18 de diciembre en la CME, el mayor mercado de derivados del mundo, así que de momento y tras este nuevo respaldo, tenemos cryptomonedas para rato.
Manuel Pinto, analista de XTB