Repsol Impacto Social, sociedad participada al 100% por Fundación Repsol, ha adquirido el 35,26% de Saema, un centro especial de empleo dedicado al desarrollo de actividades ambientales en Cantabria, informó la entidad.
En concreto, la principal línea de actividad de Saema es la recuperación y reciclaje de envases procedentes del contenedor amarillo, contando con una cuota de mercado del 74% en la comunidad cántabra.
Además del reciclaje, Saema cuenta con otras líneas de negocio como la gestión de residuos, dirigido a entidades y empresas, el punto de recogida selectiva, el mantenimiento de espacios verdes y jardinería, la divulgación ambiental y la destrucción de papel confidencial, todos ellos con perspectiva de crecimiento.
La actividad de esta empresa genera un doble impacto: social, al proporcionar empleo a personas con discapacidad, y medioambiental, a través de la reducción de emisiones de CO2.
Saema cuenta con 115 personas contratadas, de las cuales un 78% tiene alguna discapacidad y a las que se proporciona un itinerario de inserción laboral personalizado.
Para Repsol Impacto Social esta operación supone la entrada en el sector de la economía circular y refuerza su estrategia de desarrollar una red de empresas sociales enfocadas en la transición energética y en la generación de oportunidades profesionales para colectivos vulnerables.
CUARTA OPERACIÓN
Hace un año, Fundación Repsol creó Repsol Impacto Social, una sociedad cuyo objetivo es apoyar el desarrollo de empresas en España y Portugal que contribuyan al reto global de la transición energética y a la inclusión de colectivos vulnerables.
La adquisición de la participación de Saema es la cuarta operación desde el lanzamiento de Repsol Impacto Social, que ya ha entrado en el accionariado de tres empresas para impulsar su crecimiento: Sylvestris, especializada en reforestaciones; Koiki, dedicada al reparto sostenible; y GNE Finance, centrada en proveer soluciones integrales para la rehabilitación de viviendas urbanas.