Las croquetas son ese pequeño manjar cien por cien español que son como una pequeña adicción. Su textura, hecha a base de un ingrediente principal como la bechamel hace que presenten ese inconfundible sabor. Sin embargo, su calórica elaboración al llevar grandes cantidades de mantequilla, harina y un variado de grasas, puede que te haga replantearte tomarlas hechas a base de esta elaboración más tradicional.
¡No pasa nada! Si te encantan las croquetas os traemos una receta para hacer una versión saludable o fitness que puedes considerar para no deshacerte de este rico plato, y de paso incorporar más nutrientes y minerales y liberarte de las frituras u otros ingredientes menos saludabes.
1Croquetas saludables por fuera, y con un interior rico y sano por dentro
Puede que el envoltorio de las croquetas nos engañe a primera vista. Sin embargo, la calidad está en el interior, y lo cierto es que la mayoría de sus ingredientes no están a la vista, por eso es tan importante escogerlos bien si queremos hacer unas croquetas saludables. Así, la primera regla de oro es evitar emplear los productos procesados como los embutidos o fiambres con excesiva curación. Y en cuanto a la bechamel, remplazaremos la harina, la mantequilla, la leche y las féculas por otra mucho más ligera.