La firma de materiales de construcción Coemac (Corporación Empresarial de Materiales de Construcción) ha sorprendido a los inversores con un despegue explosivo. En concreto, la cotización de la compañía que preside Javier González se disparó un 25% en los primeros compases de la sesión de este lunes. La cosa no acabó ahí, sino que mejoro esas cifras y cerró por encima de los 0,5 euros la acción y un más 40%.
El despegue de la compañía “debe entenderse en un contexto de especulación, principalmente” explica el analista de XTB, Antonio Sales. Este tipo de compañías con baja capitalización y acciones baratas son propicias a sorprender de vez en cuando con alguna subida explosiva. La mejora de la antigua Urbanitas podría a su vez servir de estímulo para otra firma, Codere.
ni es raro ni tampoco demasiado difícil encontrar teorías y conspiraciones sobre que son las mismas manos poderosas las que mecen tanto a Coemac como a Codere
Los más asiduos a realizar trading con ambos valores, siempre han alertado de que ambos evolucionan de una manera muy similar. Es más, ni es raro ni tampoco demasiado difícil encontrar teorías y conspiraciones sobre que son las mismas manos poderosas las que mecen tanto a Coemac como a Codere en el mercado. Es un tema recurrente en muchos de los foros especializados que pueden encontrarse en la red.
Más allá de posibles confabulaciones, se puede hacer la prueba para comprobar cuánto hay de cierto en dicha historia. Aunque existen muchas formas de llevar a cabo la simulación, lo más lógico es utilizar dos al menos: la primera, más visual y fácil de comprender para el lector no relacionado con vectores estadísticos, es la del simple contraste entre la evolución de un valor y otro con cifras normalizadas. El segundo caso, el más utilizado por analistas y expertos es llevar a cabo una correlación entre ambos valores.
Si se decide por hacer la primera simulación, el resultado es un tanto perturbador. Una vez colocadas la evolución anual de cada valor, y después de normalizar las cifras –se utiliza una tasa 100, para que ambos valores se pueden medir igual- la evolución de las cotizaciones parece tener un patrón común. En especial, en lo que va de año hasta mediados del mes de septiembre. En esos meses, las figuras que ambos dibujan se asemejan bastante.
La pareja evolución de Coemac y Codere parece que se rompe en el mes de septiembre y comienzan a dibujar figuras algo más diferenciadas. Pese a ello, se pueden apreciar como las variaciones importantes –estas son las líneas de tendencia y no los dientes de la sierra- se confirman en ambos valores.
Al final, tras ver la evolución de ambos, la confabulación que aparece en tantos foros ni se puede confirmar, ni tampoco desmentir. La igualdad de las figuras dibujadas se pierde en las últimas semanas, pero la tendencia parece mantenerse. Incluso, antes de romperse en septiembre, la evolución de las figuras es casi calcada. Lo cual es raro, si se piensa en la actividad de ambas firmas: la construcción y las apuestas deportivas.
En definitiva, que Codere podría tomar prestado el impulso que ha cogido Coamec. Incomprensiblemente, no sería tan extraño. Es más, la compañía de apuestas deportivas también ha recibido un fuerte empujón en la sesión del lunes, superando el 3%. Los más optimistas en Codere esperan que este empujón de Coamec junto a que en unos días se disputará el mundialito de clubes, que juega el Real Madrid, ayuden a la firma verde a cerrar lo más alto posible el año.
¿La oportunidad de Coamec?
Más allá de las connotaciones especulativas detrás del impactante crecimiento de la acción este lunes, Coamec se ha convertido en un valor apetecible. “Los inversores valoran positivamente los últimos resultados de la firma, y esperan que en el último trimestre puedan ser todavía mejores”, explica Sales.
La antigua Urbanitas parece haber pasado sus momentos más difíciles estos años atrás. El derrumbe de la construcción golpeo muy fuerte a la firma, que vio reducidos sus ingresos entre 2009 y 2014 desde los 800 millones hasta los 90 millones. Pese a ello, en los últimos años ha ido mejorando esa cifra, aunque de manera muy lenta. “Se espera que tanto en el siguiente trimestre, como en 2018 su beneficio operativo pueda crecer”, argumenta Sales.
Además, no solo es la mejora del beneficio operativo lo que pueden valorar los inversores si no también que la firma va cumpliendo con su calendario de amortización de deuda. Las desinversiones y algunas ventas han permitido a la firma estabilizar la deuda neta por debajo de 3 veces el Ebitda. Una mejora importante, cuando otros años la carga de deuda suponía más de 12 veces el Ebitda.