Trabajadores de la planta de Barcelona de la compañía automovilística Nissan se manifestarán este miércoles por las calles de Madrid para pedir un futuro para las instalaciones de la ciudad condal.
La manifestación partirá a las 11.00 horas de la plaza Carlos V y llegará al Congreso de los Diputados, para así trasladar a los políticos y al Gobierno la situación en la que ha dejado a los trabajadores la decisión de la multinacional japonesa, ha informado UGT.
Desde el sindicato han denunciado que el estado actual de Nissan en Cataluña se trata de una situación «buscada y premeditada» por parte de la dirección de la firma, tanto desde Japón como desde Europa.
MENOS NIVEL PRODUCTIVO
«En estos últimos años la multinacional ha ido eliminando y deslocalizando poco a poco vehículos y ha evitado de manera sistemática que la planta de Zona Franca obtuviese la adquisición de vehículos nuevos, provocando que el nivel productivo fuese cada vez menor», han criticado desde UGT.
Así, han lamentado las «mentiras» y las «promesas incumplidas» de Nissan, ya que han recordado que la empresa se comprometió a realizar una inversión de 70 millones de euros en una planta de pintura hace apenas un año, «que no se ha cumplido.
Otro ejemplo es la serie de promesas realizadas por el que fuera director general de Nissan España en su día y hoy ejecutor del cierre, Frank Torres, no solo a los trabajadores de Nissan, sino también a la Generalitat y al Gobierno central, entre los que encuentran la creación de más de 1.000 puestos de trabajo en las plantas catalanas, que no se ha cumplido», han criticado.
PARALIZACIÓN DEL ERE
Por todo ello, UGT-Fica va a exigir al Ejecutivo de Pedro Sánchez que se involucre de manera «contundente» en el conflicto de Nissan, paralizando el Expediente de regulación de Empleo (ERE) y eliminando la fecha de diciembre de 2020 como data de cierre.
«Se ha demostrado históricamente que las plantas de Nissan son competitivas siempre que se otorga vehículos para su fabricación, como ha ocurrido en otros años y con muy poca inversión en las líneas productivas», han insistido desde UGT.
Todo ello después de que a finales del pasado mes de mayo Nissan anunciase el cierre de su planta de Barcelona, como parte de su nuevo plan estratégico a medio plazo, lo que supondrá un recorte de los cerca de 3.000 puestos de trabajo directos con los que cuenta las instalaciones y unos 25.000 empleos indirectos.