El 75% de los trabajadores está preocupado por la dificultad de encontrar un puesto de trabajo si pierde el actual, según se desprende de la encuesta condiciones de trabajo, inseguridad y salud en el contexto del coronavirus realizada por CCOO junto a la Universitat Autònoma de Barcelona.
En el estudio también se señala que el 69,7% de los trabajadores están preocupados por la disminución de sus salarios. «Se trata de dos valores que hablan de la necesidad de mantener unos ingresos y la preocupación que genera que estos desaparezcan», apunta el sindicato en el informe.
Por otro lado, la encuesta muestra preocupación por el cambio de horarios (54,5%) y de tareas (52,7%). Preguntados por el coronavirus, dos de cada tres participantes se muestran preocupados por la posibilidad de infectarse por coronavirus en su lugar de trabajo, mientras que un 72,3% está preocupado por la posibilidad de contagiar a otra persona.
PÉRDIDA DE EMPLEO POR LA PANDEMIA
Del estudio se desprende un 5,7% de los participantes han perdido su empleo desde el comienzo de la pandemia. La mayoría (3,8%) han sido despedidos, pero un 1,9% apunta que esta pérdida se debe a que no le han renovado el contrato.
Según el sexo y la edad, los hombres se han visto «ligeramente más afectados por la destrucción de empleo que las mujeres», aunque, se han detectado más diferencias por edad, ya que los jóvenes han sido los más perjudicados.
Entre los menores de 25 años, la pérdida de empleo alcanzó el 17% (11,4% por despido y 5,6% por no renovación). En el caso de los más de 50 años, registraron pérdidas de empleo en un 3,2%.
ACUDIR AL TRABAJO CON SÍNTOMAS
El sindicato también ha alertado de que los bajos salarios están facilitando que más personas vayan a trabajar con síntomas que se corresponden con los del coronavirus, según un 13,1% de las respuestas de la encuesta. Esta cifra es superior entre quienes trabajan en sectores considerados esenciales (14,2%) que entre los no esenciales (6,4%) y alcanza el 18,1% entre los participantes que durante la pandemia realizaron tareas de atención al público.
Por otro lado, los resultados muestran que el porcentaje de trabajadores que fueron a trabajar con síntomas es casi el doble que entre los que afirman que su salario les permite cubrir las necesidades del hogar como mucho «algunas veces», que entre quienes pueden hacerlo siempre o «muchas veces». Esto, según CCOO, resalta que los salarios bajos y la situación socioeconómica fueron un factor «nocivo» en el contexto de la pandemia.
Por sectores, uno de cada cuatro participantes en la encuesta han afirmado que fueron a trabajar teniendo síntomas pese a trabajar en el ámbito sociosanitario (auxiliar de enfermería, geriatría o personal de enfermería).
SIN MEDIDAS DE PROTECCIÓN
Más del 70% de los participantes han manifestado que han trabajado en algún momento sin las medidas de protección adecuada, porcentaje que crece en al 73,5% o al 78,1% en el caso de los trabajadores de sectores esenciales o de los que realizaron tareas de atención al público.
Según la encuesta, también se ha duplicado el porcentaje de personas que han trabajado con grandes exigencias (44,3%) en relación con los valores de 2016 (22,3%). El estudio señala además que el 21,5% de los participantes en la encuesta ha consumido tranquilizantes, sedantes o somníferos durante el último mes, el 36,7% ha afirmado que su salud ha empeorado durante la pandemia y el 55,1% apunta que tiene una «mala salud mental».
Durante la presentación del informe, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha señalado lo necesario que es que la salud laboral esté vinculada al propio concepto de salud pública. Para Sordo, es necesario integrar las dinámicas de salud pública con la salud laboral y en los preceptos que se basa la salud laboral, que se ha visto superada a través de una externacionalización de las propias dinámicas o planes de prevención de riesgos, que, según su punto de vista, convendría revisar.
Respecto al teletrabajo, Sordo ha apuntado que conviene acelerar los procesos de regulación del trabajo a distancia. Según el informe, el 30% de los encuestados están usando esta modalidad de trabajo.