El vicepresidente ejecutivo de Nissan en Rusia y responsable de las operaciones industriales de Nissan Motor Ibérica (NMISA), Frank Torres, ha reclamado diálogo a los trabajadores para empezar a negociar en el marco del proceso de consultas y colaboración tanto al Gobierno como a la Generalitat tras el anuncio de cierre de las plantas en Cataluña.
Lo ha dicho este jueves en una rueda de prensa telemática, en la que ha advertido a los sindicatos de que «cualquier amenaza o intención de no querer colaborar va en contra de todo», aunque ha declarado estar confiado en que se sentarán a hablar.
«Insistimos en que tiene que haber ese diálogo en el marco donde está amparado Nissan, que es el marco de consultas. Tienen que reconocer a los interlocutores y tienen que entender que si Nissan ha decidido poner a alguien local es con el ánimo de establecer ese diálogo y ver cuál es la mejor solución posible para los empleados», ha insistido, en referencia a su persona.
LA DECISIÓN VIENE DE JAPÓN
En este sentido, ha defendido que él no ha tomado la decisión del cierre, sino que ésta proviene de Japón en el marco de un escenario global por exceso de capacidad productiva: «Si no estuviera Frank Torres y estuviera otra persona la decisión no hubiese cambiado».
Ha explicado que el centro de recambios de Nissan en El Prat de Llobregat (Barcelona), en el que trabajan 114 personas, no ha quedado afectado por el plan de cierre porque han hecho entender que los retos que tiene son distintos a los de la planta productiva: «Hemos convencido a Europa de que el centro de recambios no esté afectado y por eso lo hemos excluido.
Torres ha insistido en que la compañía, tras estudiar la situación de las plantas catalanas, no ha encontrado ninguna solución viable para su futuro en comparación con otras factorías porque tiene una baja capacidad productiva y requiere altos niveles de inversión, lo que se traduce al final en un problema de competitividad.
ACUERDO MENOS «TRAUMÁTICO»
Torres ha sostenido que ahora toca asumir esta decisión y, a través del proceso de consultas, sentarse a hablar cuanto antes para intentar conseguir el mejor acuerdo «y el menos traumático para los empleados».
Preguntado por la posibilidad de relocalizar a empleados de Nissan a otras fábricas, Torres ha dicho que lo primordial es el diálogo y que dentro de él están abiertos a escuchar a todos: «Se tiene que producir dentro del proceso de consultas. Ahí tenemos que dialogar y buscar opciones».
El próximo lunes la compañía empezará con la comunicación a los comités de empresa implicados del proceso de consultas para que puedan asignar a 13 miembros para la comisión de negociación, designada por los comités de los centros implicados en el cierre.