El 94% de las bodegas españolas ha reconocido que la crisis del coronavirus les está afectando «gravemente», según se desprende de la encuesta realizada por la Federación Española del Vino (FEV), coincidiendo con el fin del estado de alarma.
En concreto, dos meses después de la primera encuesta, el 93,9% de las bodegas sigue considerando que se han visto afectados «bastante», «gravemente» o «muy gravemente» la pandemia, lo que supone solo un 2% menos que en el anterior estudio.
Las bodegas han señalado que la facturación durante el primer semestre del año se ha reducido de media en un 38,7%, impactado por el coronavirus y el cierre de la hostelería.
El informe muestra que son microempresas, las que tienen menos de 10 trabajadores y cerca de dos millones de euros de facturación, son las que más se están viendo afectadas por esta crisis, con una caída mediadel 54% de sus ventas en los seis primeros meses del año, mientras que el resto también advierten de una importante reducción de cerca del 30%.
Respecto a las previsiones de futuro, las bodegas estiman que para el ejercicio 2020 su facturación sufrirá de media una reducción cercano al 28% y solo un 35% de ellas cree que podrá recuperar los niveles de facturación previos a la crisis en 2021, mientras que un 56% creeque esto no ocurrirá hasta 2022.
Por canales, la hostelería es el más afectado tras más de dos meses de cierre total y su posterior reapertura gradual con límites de aforo. Esto ha provocado caídas de ventas de las bodegas de hasta el 65% a nivel nacional y del 49% a nivel internacional. También se ha vistoafectado, aunque en menor medida, el canal alimentación, con una reducción de la facturación de entre el 12% (nacional) y el 23% (exportación).
La Federación Española del Vino considera «necesario» que la Administración siga apoyando con iniciativas concretas a un sector que es vital para la economía y para el desarrollo rural y social de muchos territorios de toda España y que se está viendo muy perjudicado por laactual crisis.
En este sentido, creen que las recientes medidas extraordinarias de apoyo al sector van en la buena dirección y suponen una ayuda importante aunque advierten de que las cantidades destinadas son insuficientes para las necesidades actuales y, en algún caso, no se adaptan bien a la tipología de empresas más pequeñas.
Respecto a los Expediente de Regulación Temporales de Empleo (ERTE), la federación considera que es necesaria su ampliación como por la posible falta de mano de obra para la vendimia que está a punto de comenzar.
Por eso, la FEV se une a la reivindicación de FIAB al Gobierno para ampliar los ERTE en todas aquellas empresas de la industria de alimentación y bebidas y distribuidores que acrediten un porcentaje del 40% de su facturación dependiente del canal Horeca.
INCREMENTO DEL ‘ECOMMERCE’
Por otro lado, las bodegas, que tras el cierre de la hostelería y el confinamiento de los hogares, se han lanzado al comercio ‘online’ en los últimos meses.
El 81,7% reconoce que vende en este canal, cuya facturación ha aumentado de media del 161% desde mediados de marzo, pero que todavíasupone un porcentaje muy pequeño de las ventas para la gran mayoría de ellas.
Sin embargo, un 84% de las bodegas que comercializan ‘online’ aseguran que han intensificado su estrategia por Internet, debido a la situación provocada por el coronavirus.
Respecto a las exportaciones, que también se han visto afectadas por la crisis sanitaria, éstas han caído un 12% en abril, pero el 61% de las bodegas asegura que empieza a notar cierta mejoría en algunos mercados de exportación, en primer lugar del mercado asiático y posteriormente en países europeos como Alemania, Países Bajos y los países nórdicos.
La FEV considera, que en el ámbito internacional, es «fundamental» que el Gobierno junto a sus socios europeos, siga trabajando para llegar a un acuerdo con Reino Unido que evite un ‘Brexit’ duro y para eliminar los aranceles adicionales impuestos por Estados Unidos el año pasado.