Iberdrola ha acordado con la compañía sueca Svea Vind Offshore AB (SVO) una opción de adquisición mayoritaria para el desarrollo futuro de la mayor cartera de proyectos de energía eólica marina en Suecia, que suman 9 gigavatios (GW) de capacidad y están en distintas fases de tramitación, pudiendo entrar en funcionamiento a partir de 2029, informó la compañía.
Con esta operación, la quinta en lo que va de año y en un entorno marcado por la crisis por el Covid-19, el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán irrumpe en un nuevo mercado europeo en el que hasta ahora no tenía presencia, el sueco, que dispone de un enorme potencial de desarrollo en el ámbito de las energías renovables, estratégico para el grupo español.
En concreto, estos proyectos se agrupan en torno a dos áreas geográficas, consideradas de interés nacional para el desarrollo de la eólica: Gavle (seis parques que suman 5,1 GW de potencia) y Oxelosund (dos parques marinos con 3,9 GW de potencia conjunta).
Según señaló la energética, el objetivo del acuerdo marco es cerrar contratos específicos para cada proyecto, gracias a los cuales Iberdrola tomará una participación mayoritaria en cada una de las instalaciones marinas que SVO promueve.
El primero de los parques eólicos marinos promovido por SVO, el de Utposten I, de 250 MW de capacidad, está en proceso avanzado de obtención del permiso ambiental.
Entre las ventajas adicionales que aporta la cartera de proyectos de SVO figura que los parques se encuentran cerca de la costa, en aguas poco profundas, y en zonas con velocidades de viento elevadas. Además, van a estar ubicados cerca de áreas con una actividad industrial relevante y una buena infraestructura de redes de transmisión, lo que facilitará la distribución y comercialización de la energía limpia generada.
El Gobierno sueco tiene como objetivo lograr que en 2040 el 100% de su energía eléctrica proceda de fuentes de energía renovables. Dado que está en pleno proceso de abandono de la energía nuclear -que aporta en la actualidad unos 66 teravatios hora (TWh), el 42% del total-, el país va a tener que desarrollar al menos 70 TWh renovables para lograr sus metas, con unos 30 TWh provenientes de la eólica marina.
Iberdrola prevé unas inversiones récord de 10.000 millones este año distribuidas en distintos proyectos. En eólica marina, el grupo cuenta ya con casi 1.200 MW operativos en Reino Unido (East Anglia One y West of Duddon Sands) y Alemania (Wikinger).
QUINTA OPERACIÓN EN PLENA CRISIS DEL COVID-19
Esta es la quinta operación corporativa del grupo en lo que va año, en un ejercicio además marcado por la crisis por la pandemia de la Covid-19.
El pasado 17 de junio, Iberdrola notificó el lanzamiento una OPA amistosa para la adquisición del 100% de la empresa australiana de energías renovables Infigen Energy, que cuenta con el respaldo del consejo de administración y del principal accionista de la compañía -TCI Fund Management, con el 33% de las acciones-, por 840 millones de dólares australianos (unos 510 millones de euros).
Además, en mayo, compró dos proyectos eólicos terrestres en Escocia, que suman 165 MW de capacidad y cuyo desarrollo implicará una inversión de alrededor de 190 millones de euros, y adquirió la compañía francesa Aalto Power por algo más de 100 millones de euros.
Asimismo, en marzo, Iberdrola se hizo con el 100% del capital del parque eólico marino francés Saint-Brieuc, que implicará una inversión aproximada de 2.500 millones de euros.
Los 496 MW de potencia de este complejo, que comenzará a construirse en 2021, entrarán en operación en 2023, generando la energía limpia suficiente como para satisfacer el consumo de electricidad de unas 835.000 personas.