El presidente de Aena, Maurici Lucena, ha señalado este jueves que la compañía invertirá más 1.200 millones de euros en infraestructuras en 2020 y 2021. Lucena, que ha participado en la cumbre ‘Empresas españolas liderando el futuro’ organizado por la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), ha señalado que la compañía ha retomado desde hace tres semanas la actividad inversora y que esto es una «buena noticia» porque «significa que el país se mueve».
Asimismo, ha señalado que los proyectos de ampliación para los aeropuertos de Adolfo Suárez Madrid-Barajas y Josep Tarradellas Barcelona-El Prat seguirán adelante, aunque es posible «que se desplacen en el tiempo de manera significativa».
El presidente del gestor aeroportuario también ha indicado que siendo «conscientes del efecto tractor» que Aena tiene sobre otras compañías, ha tratado de ser «sensible» adoptando medidas como descuentos, aplazamientos y exoneraciones en los pagos.
INCENTIVO PARA LAS AEROLÍNEAS
Además, Lucena ha anunciado que esta semana se ha aprobado el incentivo comercial para las líneas aéreas, que supone un descuento en las tarifas de aterrizaje para fomentar «que haya movimiento en los aeropuertos en los próximos meses», porque ahora, «en lugar de los pasajeros, lo que preocupa son los aviones».
El presidente de Aena ha subrayado que durante la crisis del coronavirus, «la más inesperada» y «compleja», la compañía se ha visto afectada por las restricciones de movilidad, las «consecuencias clásicas de la recesión», tales como las pérdidas de poder adquisitivo, así como las consecuencias económicas en compañías relacionadas –aerolíneas, turoperadores– y el factor psicológico que en determinados segmentos está provocando reservas a la hora de viajar.
Ha recordado que durante los meses de abril y mayo Aena sufrió reducciones del tráfico de más del 99%, lo que supone los meses «más duros de toda la historia» de la compañía y representa una «paradoja» tras los buenos datos de 2019.
100 MILLONES DE AHORRO
No obstante, ha indicado que la reacción «fue casi instintiva» para responder a la situación, protegiendo la caja y reduciendo casi en el 40% el gasto de efectivo, con lo que han conseguido ahorrar casi 100 millones de euros al mes, así como realizando una ronda con diferentes bancos para obtener liquidez, por lo que ahora dispone de casi 3.000 millones de euros, lo que da «tranquilidad para encarar los próximos meses».
Para la vuelta a la actividad, Aena ha estado colaborando con el Gobierno de España, la Comisión Europea, líneas aéreas, agentes de handling y demás agentes implicados para rediseñar los procesos aeroportuarios.
Así, se han establecido procesos aeroportuarios seguros, con una distinta gestión de las colas, procesos de desinfección más profundos, distancias mínimas, aforos máximos, tomas de temperatura en vuelos internacionales –a través de cámaras termográficas– y recogida y lectura de un formulario para poder localizar al viajero en el caso de contacto próximo.