Como tantas otras comunidades autónomas, Cataluña también encara el verano a la caza y captura del turista nacional. Aunque a diferencia de otras regiones, y poniendo el foco en Barcelona, el discurso chirría en contraste con el mantenido hasta hace escasos meses. La cosmopolita Barcelona vuelve ahora su mirada a las regiones vecinas apelando al “turismo de proximidad” o “local”, con una campaña que adolece del guiño habitual al turista internacional, en busca de la empatía doméstica. Circunstancias de la vida, el destino estrella de Cataluña ve tornar ahora su mayor ventaja en su peor inconveniente. Mientras que la tradicional oferta de sol y playa de la Costa Brava (Girona) o la Costa Dorada y el Delta del Ebro (Tarragona) parten con más opciones de recibir al turista nacional, fidelizado durante años.
En cualquier caso, la Generalitat estrena campaña de turismo, pero también tono y lenguaje. El cacareado “España nos roba” cede paso al “aquí cabemos todos”, mejor dicho al «aquí todo el mundo será acogido con una sonrisa y toda la seguridad del mundo», en palabras del president del Gobierno catalán, Quim Torra. El covid-19 ha alterado muchas cosas a su paso y el turismo no ha escapado a su impacto.
No son tiempos para recordar viejas demandas, al menos en el sector del turismo. Al fin y al cabo toca afrontar la ‘nueva normalidad’. De hecho, el presidente de la Generalitat ha llamado este lunes a veranear en la comunidad autónoma tras el impacto de la crisis del coronavirus durante la presentación de la nueva campaña de promoción turística de Cataluña para este verano.
Torra ha expuesto que Cataluña es «la casa de todo aquel que quiera venir», y ha puesto el foco en el turismo local y el que se pueda mover por el territorio en un radio de unas pocas horas. «Si hay un país de acogida, éste es el nuestro. Si hay un país de paso, es el nuestro, y si hay un país de marca es Cataluña», ha remarcado Torra.
TARRAGONA Y EL TURISMO DE PROXIMIDAD, “EL DE SIEMPRE”
Para la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Tarragona (FEHT) la campaña turística lanzada esta semana por el Ejecutivo catalán es “la de todos los años, atrasada por la crisis del coronavirus, quizá con más boato, por las circunstancias, pero dentro de la normalidad”, explica a MERCA2 el portavoz de la patronal, Xavier Guardià.
El responsable de la federación empresarial que representa a campings, alojamientos, hoteles y restaurantes asume que “si bien la temporada será la más horrorosa en muchos años, nuestras sensaciones es que vamos hacia mejor”. En este sentido, Guardià insiste en las demandas del sector que ayudarían a amortiguar el golpe: “hemos solicitado que se pase de las moratorias a las ayudas directas, es decir, exigimos rebajas en los impuestos y en las tasas, por ejemplo, las que se pagan por las terrazas”, incluso piden la suspensión de la tasa turística -finalista para promoción- para “que no se aplique este año”, para abaratar la oferta al turista.
“Los ICO están muy bien, pero hay que devolverlos”, manifiesta Guardià que pide equiparar las demandas del sector a las que realizan las administraciones: “cuando los alcaldes piden ayudas a la Generalitat, el president al Gobierno central, y el presidente del Gobierno a Europa, no las piden para devolverlas, pero a nosotros nos mandan al banco”.
En cuanto a la especial consideración hacia el mercado nacional exhibida en la campaña turística de este año del Gobierno catalán, Guardià no entra en valoraciones, puesto que en la provincia de Tarragona “el 50% del turismo lo conforman los catalanes y los visitantes del resto de España, y el otro 50% procede del resto de Europa”. Más allá de los datos, el representante de FEHT admite que “seguramente la campaña de Barcelona se parece más a la promoción que hacen ahora otras ciudades como Madrid, más acostumbradas al turismo asiático, americano o ruso, pero nosotros ofrecemos sol y playa”.
De ese fifty-fifty en el que se reparte el turismo, el lado internacional está liderado por los británicos, franceses, holandeses, alemanes y rusos. En la otra mitad, mayoritariamente nacional, “pensamos que mercados como el español y también el francés con facilidades de movilidad terrestre reaccionen con mayor rapidez por una cuestión de proximidad y al tratarse también de una demanda más familiar”
El sector del turismo en Tarragona conforma “un mercado muy maduro” con seis millones de visitantes en un año normal, que suponen unos 22 millones de pernoctaciones, y contribuyen con un 21% del PIB de la provincia.
Y aunque este año las expectativas son malas, “sirva como ejemplo que damos como buena noticia que PortAventura abra el día 8 de julio al 30%, algo que en cualquier otro verano hubiera sido impensable”, la confianza recae en el regreso del turista “muy fidelizado que lleva años viniendo la mismo destino”, por la seguridad que aporta “conocer el alojamiento, el entorno, donde están la farmacia o los restaurantes cercanos”.
Y en ese marco del turista fidelizado se puede incluir al español, como afirma Guardià, “el catalán o andaluz quizá este año no hará un viaje largo, y no sólo por patriotismo, si no porque nosotros somos un destino turístico” y, en ese segmento, se atisba cierto repunte. La tendencia será conservadora este año frente a cambios susceptibles de llevarse a cabo en mejores ocasiones.
PARA GIRONA, EL TURISMO LOCAL NO SERÁ SUFICIENTE
La Federación de Hostelería de la Comarca de Girona (FHCG) también hace hincapié en las peculiaridades de cada zona que conforman un mosaico de ofertas turísticas en el mismo territorio. En referencia al turismo de proximidad “desde la Federación creemos que no es suficiente para llenar nuestra plazas hoteleras”, comenta a MERCA2 la portavoz Marina Figueras.
Según los datos de la patronal en la provincia de Girona, la población residente asciende a 757.497 habitantes pero dispone de capacidad para acoger a 431.013 turistas entre las plazas hoteleras, de campings, de apartamentos turísticos, turismo rural y viviendas turísticas. “Por tanto, es difícil llenar todas estas plazas solo con el turismo de proximidad, necesitamos que haya movimiento entre diferentes países y que los turistas internacionales puedan venir a la provincia de Girona, es fundamental”, asegura Figueras.
En Girona el 71,7 % del gasto de los turistas nacionales proviene de los ciudadanos de la provincia de Barcelona, y sobre los turistas internacionales el 53,9 % lo representan los turistas franceses, es decir, “dos mercados básicos para nuestras comarcas y que de momento no pueden visitarnos”.
La reflexión que hacen desde la patronal gerundense sobre la actuación de la administración y su papel a la hora de reactivar el turismo, se centra en la crítica: “consideramos que los Gobiernos actuales tanto el de España como el de Cataluña no son conscientes de la importancia del turismo, ni de lo transversal que es este sector para la economía”, señala la representante de FHCG.
“El turismo no solo beneficia las actividades de hostelería o turísticas propiamente y en esta crisis se ha visto”, prosigue Figueras, “del turismo depende la construcción y todos los profesionales independientes relacionados con este sector, el transporte, el comercio, las inmobiliarias, clínicas privadas, sector del vino, y un larguísimo etcétera”, y concluye “es imprescindible poner en marcha un plan de choque para sacar de esta crisis al turismo”.
Respecto al verano, “esta temporada en general no será buena, porque hemos perdido dos meses de trabajo” afirma. La buena noticia se intuye en el turismo rural “que se podrá salvar para los meses de julio y agosto, y que prevé una ocupación entre el 80% y el 90%.
LA INVERSIÓN MÁS AMBICIOSA DE LA HISTORIA EN TURISMO
Con el lema ‘Catalunya és casa teva’ (Catalunya es tu casa), la campaña publicitaria puesta en marcha por la Generalitat quiere potenciar el turismo de proximidad y captar a turistas de Cataluña, el resto de España y mercados internacionales, según explicaba este lunes la consellera de Empresa y Conocimiento de la Generalitat, Àngels Chacón.
Para reactivar el turismo e intentar posicionarlo en los lugares de preferencia que ocupaba antes de la pandemia, la consellera ha indicado que se desembolsarán unos 7,4 millones de euros, la inversión «más importante» nunca hecha en promoción turística.
El presidente de la Generalitat ha reiterado su petición al Gobierno de 7.500 millones de euros en ayudas directas para reactivar el sector turístico catalán, que representa el 12% de su PIB y el 14% del empleo.
