Las asociaciones de taxistas consideran que el sector tardará tiempo en volver a la normalidad tras el fuerte impacto por la pandemia de Covid-19 y, aunque esperan un trasvase de viajeros del transporte colectivo, por miedo al contagio, no creen que suponga un incremento de facturación mayor del 8% o el 12%.
En los próximos meses, el sector vislumbra un panorama en el que persistirá la caída de usuarios en aeropuertos, estaciones y otros centros de transporte y la cancelación de multitud de eventos de todo tipo, a lo que se suma el fomento del teletrabajo. En ciudades pequeñas y poco turísticas, temen que los costes superen los ingresos.
Las asociaciones del sector del taxi Fedetaxi y Antaxi han explicado este miércoles a los Reyes el impacto de la pandemia en su sector ya desde el mes de febrero, cuando los taxistas empezaron a notar de forma sensible el efecto de las noticias y la cancelación o aplazamiento de congresos, ferias y reuniones.
Según han informado fuentes de Zarzuela, los Reyes han mantenido este miércoles una videoconferencia con representantes de estas asociaciones como continuación de sus contactos con otros sectores de transporte –AENA, RENFE, Asociación de Líneas Aéreas, EMT y Metro de Madrid y Comité Empresarial del Transporte–.
El taxi también sufrió, desde marzo, el freno de la actividad en estaciones de tren, puertos, aeropuertos, intercambiadores de transportes y puntos de generación de habitual alta demanda de viajeros.
Con el desplome de la movilidad a partir de la declaración del estado de alarma, el sector estima que la solicitud de servicios por aplicaciones o emisoras fue de solo un 10 por ciento respecto de lo habitual hasta prácticamente a última semana de mayo, descontando aquellos servicios que se han realizado gratis, voluntaria y solidariamente para sanitarios y otro personal esencial.
Algunas ciudades han tomado medidas para reducir la oferta de taxis como, por ejemplo, Sevilla, donde solo podía trabajar diariamente un 25% de la flota, Barcelona, con un 20%; Madrid hasta un 50%, entre otros cientos de municipios españoles.
De este modo, la actividad económica y la facturación de los taxistas han estado hasta el final del mes de mayo en torno a un 10 o un 20% de las cifras normales. La actividad ha sido inferior al 75% de la normal, y ahora está remontando a entre un 20 y un 40%, según las distintas comunidades autónomas.
SERVICIO ALTRUISTA EN LA PANDEMIA
Durante la emergencia sanitaria, el taxi prestó servicio fundamentalmente para ancianos, hospitales, pacientes, enfermeros, médicos, muchas veces de forma altruista y desinteresada, según las asociaciones, que han añadido que cuando hubo compensación por parte de la Administración se devolvió para compensar el déficit en material sanitario.
El sector del taxi de España está compuesto por 63.494 titulares de licencia de taxi, de los cuales el 98,3% son trabajadores autónomos, y en torno a 35.000 conductores asalariados, dando sustento a 100.000 familias en toda España.
Además, arrastraba ya una fuerte crisis por la irrupción de la modalidad de vehículo de alquiler con conductor (VTC) liberalizado del año 2009 al 2015, que ha pasado de 2.500 vehículos a casi 17.000 en toda España.