Ian Wishart para Bloomberg
La Unión Europea comenzará a desertar este miércoles sobre lo que los 27 países quieren de un acuerdo de transición después del Brexit, con el objetivo de lograr una posición unificada que puedan presentar ante el Reino Unido, una vez que las conversaciones rompan el estancamiento actual.
Los enviados europeos discutirán el formato y la duración de la transición, según un documento elaborado para la reunión visto por Bloomberg. También hablarán sobre la futura relación comercial y sobre lo que quiere la UE a cambio del acuerdo de transición, que las empresas británicas consideran crucial para evitar el caos a partir de marzo de 2019.
El bloque ha adoptado esta estrategia antes: establecer una posición fija y esperar que el Reino Unido esté de acuerdo. Mientras que los 27 han mantenido una postura unida en la primera fase de conversaciones, las divisiones son más probables una vez que las negociaciones pasen a la futura relación comercial, ya que cada país tendrá diferentes prioridades. La canciller alemana Angela Merkal ha dicho que la segunda fase será “innegablemente más complicada que la primera”.
«La segunda fase será innegablemente más complicada que la primera”
Ambos bandos esperan que las conversaciones sobre el intercambio comercial y la transición puedan avanzar después de una cumbre a mediados de diciembre. Pero eso no pasará a menos a que Gran Bretaña ofrezca una cuota de salida lo suficientemente buena como para satisfacer a los líderes de la UE.
Aunque el secretario británico para el Brexit, David Davis, ha señalado que se podrían hacer concesiones sobre el acuerdo financiero, hasta el momento ha dado mayores detalles al respecto. En un viaje a Roma este martes que es parte de una campaña diplomática para desbloquear las conversaciones, no dio nueva información con respecto al pago, según el ministro italiano de Asuntos Europeos, Sandro Gozi.
Cuatro libertades
Las negociaciones reiniciarán en Bruselas este jueves. La última ronda terminó en un punto muerto por la discusión de la cuota de salida. Entre tanto, el tiempo sigue avanzando y cada vez falta menos para que el Reino Unido abandone oficialmente el bloque en marzo de 2019. Y lo hará con o sin acuerdo.
El miércoles, los enviados comenzarán a discutir la duración ideal de la fase de transición, su alcance y si el bloque impondría en el Reino Unido durante ese tiempo las “cuatro libertades” de la UE, incluyendo el libre movimiento de personas.
La primera ministra Theresa May dijo que quiere lo que ella llama un período de implementación de aproximadamente dos años. También le prometió a las compañías que sólo tendrán que hacer una serie de cambios después del Brexit. El Reino Unido dice que los ciudadanos de la UE podrán entrar libremente durante la transición, pero que se implementará un sistema de registro.
Si Gran Bretaña no obtiene un acuerdo de transición, el intercambio comercial con su socio principal se revertirá a los términos de la Organización Mundial de Comercio hasta que ambos bandos estén en condiciones de llegar a un acuerdo más beneficioso. Los funcionarios de la UE dicen que bajo el escenario más optimista, esto no podría ocurrir hasta 2021.
Los diplomáticos también discutirán cómo será la relación final entre ambos. De acuerdo al documento, deben debatir si ese acuerdo debe consagrarse en un pacto global o en tratos separados sobre temas como el comercio, la cooperación de defensa y la coordinación de seguridad, lo que podría facilitar su ratificación.