El ordenamiento jurídico español establece que hay dos formas de trabajar, o bien como asalariado por cuenta ajena o como autónomo por cuenta propia. En el caso de los extranjeros, estos pueden trabajar a través de cualquiera de estas modalidades, pero para poder hacerlo necesitan cumplir una serie de requisitos y trámites administrativos.
Como vas a ver a lo largo de este artículo, no se trata de nada complejo. Sin embargo, si no tienes los permisos pertinentes no podrás darte de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos y por tanto no podrás cotizar por tu actividad. Por eso, antes de poner en marcha tu proyecto asegúrate de que cumples con los requisitos.
1Autorización de residencia temporal y trabajo por cuenta propia
Si un extranjero quiere ser autónomo en España lo primero que necesita es tener en vigor una autorización de residencia temporal y de trabajo por cuenta propia. Para obtenerla es necesario cumplir con los requisitos que exige la ley en cada momento. Aunque esta puede ir variando, lo normal es que se exija tener la cualificación necesaria para ejercer la profesión, no hallarse ilegalmente en España y carecer de antecedentes penales.
Hay que demostrar además una cierta viabilidad del negocio, por lo que habrá que presentar documentación relativa a la inversión que está previsto realizar y la previsión de que ese negocio efectivamente va a dar beneficios suficientes como para permitir a su titular mantenerse. A ello se suman requisitos específicos en ciertos casos como la necesidad de estar colegiado.