Enel ha decidido acelerar el cierre de la planta generadora a carbón Central Bocamina en Chile y ha solicitará formalmente a las autoridades del país -la Comisión Nacional de la Energía de Chile (CNE)- que autoricen el cese de operaciones de sus dos unidades, informó la compañía.
En concreto, el grupo, matriz de la española Endesa, prevé el cese de la unidad Bocamina I (128 MW) a más tardar el próximo 31 de diciembre, y de Bocamina II (350 MW) como muy tarde el 31 de mayo de 2022.
Así, el cierre, que está sujeto a la autorización, se adelanta respecto de lo que proyectó Enel Generación Chile en el Plan Nacional de Descarbonización del país, firmado con el Ministerio de Energía chileno el 4 de junio de 2019, el cual dispuso el cierre de la Unidad I a más tardar a finales de 2023 y la clausura de Bocamina II a más tardar en 2040.
El director Global Power Generation de Enel, Antonio Cammisecra, destacó que esta decisión les convertirá en la primera compañía generadora eléctrica en Chile «en retirarse plenamente de la generación a carbón, al tiempo que continuamos construyendo de forma segura la capacidad renovable, con beneficios concretos desde un punto de vista medioambiental, económico y social».
«Esto está completamente en línea con la estrategia de descarbonización de nuestro grupo. Nuestro enfoque se dirige a nuestra gente, y específicamente a los colegas que trabajan en plantas de carbón y tecnología de carbón, a quienes se les da la oportunidad de capacitarse en otras tecnologías dentro del grupo», añadió.
Por su parte, el director de Enel para América Latina, Maurizio Bezzeccheri, valoró que la estrategia de grupo «se refleja plenamente en América Latina, donde nos encontramos construyendo capacidad renovable para descarbonizar la flota existente conjuntamente con enfrentar las necesidades en aumento de grandes clientes comerciales e industriales».
DETERIORO DE 790 MILLONES, PERO SIN IMPACTO EN LA POLÍTICA DE DIVIDENDO
El valor libro neto de las dos unidades de Bocamina asciende a aproximadamente 790 millones de euros a nivel del Grupo Enel, incluidos los costos de desmantelamiento.
De esta manera, las decisiones de los Directorios de Enel Chile y Enel Generación Chile podrían implicar el reconocimiento de un deterioro de los activos involucrados por un monto de hasta ese valor contable neto. El grupo subrayó que el impacto financiero asociado se informará en su informe financiero semestral al 30 de junio de este año.
No obstante, indicó que cualquier pérdida por deterioro derivado de la esperada interrupción de la generación por las dos unidades de Bocamina no afectaría en ningún caso la política de dividendos de Enel, que se basa en un pago proporcional al ingreso ordinario neto del grupo, que no se vería afectado por dicho deterioro.
La decisión está en línea con el objetivo del grupo dirigido por Francesco Starace de descarbonizar completamente su matriz de generación a 2050. Con este objetivo, la compañía está trabajando para completar la eliminación del carbón a 2030. Además, el Grupo Enel está aumentando su capacidad renovable gestionada a 60 gigavatios (GW) para 2022, desde los 46 GW actuales.