Almirall obtuvo un beneficio neto de 48,6 millones de euros en el primer trimestre, cifra un 62,5% superior a la del mismo periodo del año pasado, debido al aprovisionamiento de mayoristas, producido principalmente en marzo en Europa por el Covid-19, según ha informado este lunes la compañía, que mantiene sus estimaciones financieras para 2020, sujetas a una progresiva normalización del negocio a final del segundo del trimestre.
Tras comprobar que ciertos medicamentos, como el paracetamol, podían ayudar a paliar los síntomas provocados por el Covid-19, Almirall aumentó su producción para abastecer al mayor número posible de afectados.
«Nuestras fábricas han seguido funcionando a pleno rendimiento gracias al esfuerzo realizado por todos los empleados de Almirall. Como resultado, hemos podido garantizar el suministro de medicamentos a cada uno de los pacientes que los necesitan», ha explicado la firma.
Entre otras acciones, Almirall ha estado produciendo geles antibacterianos en Alemania para distribuirlos en hospitales y clínicas.
Asimismo, ha donado equipos de protección y cremas tópicas Balneum a hospitales en varios países, y ha colaborado con la Fundación Leitat para desarrollar respiradores fabricados mediante impresión en 3D destinados a hospitales y unidades de cuidados intensivos.
El grupo farmacéutico registró un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 88,3 millones de euros entre enero y marzo, un 10,1% más que en el mismo periodo de 2019 (+9,7% a tipo de cambio constante), con la debilidad del margen bruto compensada por menores costes debido al Covid-19.
Por su parte, los ingresos de Almirall sumaron 247,3 millones de euros en el primer trimestre, un 6,5% más, con un crecimiento de las ventas netas del 7,5%, hasta los 241,3 millones de euros, impulsadas por los motores de crecimiento, el stock de mayoristas y un impacto positivo en el ingreso diferido que compensan la entrada de genéricos para Aczone.
El consejero delegado de Almirall, Peter Guenter, ha resaltado que, en términos de negocio, es demasiado pronto para calibrar el impacto a largo plazo de la crisis sanitaria del Covid-19 en el sector de la salud en general, y en Almirall en particular.
«Sin embargo, estamos satisfechos de este primer trimestre, que ha alcanzado los objetivos previstos antes de la crisis. Pese a los buenos resultados obtenidos en este complicado inicio de año es inevitable que, como cualquier otra compañía, nos veamos impactados de forma adversa en el segundo trimestre por los efectos del Covid-19», ha destacado.
Guenter ha afirmado que la compañía mantiene las estimaciones financieras asumiendo que existe una progresiva normalización del entorno sanitario al final del segundo trimestre.
«Por supuesto, proporcionaremos los detalles tan pronto como sea posible. Mientras tanto, estamos más comprometidos que nunca para dar los mejores resultados a nuestros accionistas, los mejores medicamentos a nuestros pacientes y para ayudar a la sociedad tanto como podamos en estos momentos inciertos», ha añadido.