Las factorías del Grupo PSA en Vigo (Pontevedra) y Figueruelas (Zaragoza), así como las de Iveco (CNH Industrial) en Madrid y Valladolid retomarán este lunes 11 de mayo la actividad productiva, que estaba detenida desde hace semanas con motivo de las medidas adoptadas para evitar la propagación del coronavirus.
Estos cuatro centros productivos se convierten en las últimas plantas en volver al trabajo de todas las de fabricación de vehículos que se encuentran instaladas en España, ya que las demás han ido reabriendo de forma parcial y progresiva en los últimos días, desde que el Gobierno permitiese volver a la actividad a los sectores no esenciales.
En el caso de las fábricas de Vigo y Figueruelas del consorcio francés PSA, la recuperación de la actividad se llevará a cabo de una forma «progresiva y «segura» desde este lunes, «en un contexto de reanudación de las actividades comerciales».
Las dos instalaciones irán introduciendo de forma gradual los turnos de trabajo, siempre con medidas de seguridad e higiene reforzadas, y, en función de la demanda, se irá procediendo a la normalización de la actividad productiva, que estará muy marcada por la disponibilidad de piezas y componentes por parte de la cadena de suministro.
«Proteger a nuestros empleados y proteger a nuestra compañía siguen siendo los dos principios intangibles para la gestión de nuestras operaciones. Nuestro protocolo de medidas mejoradas ofrece un alto nivel de protección a nuestros empleados y es el primer criterio para reiniciar nuestros centros de producción», explicó el director industrial de Grupo PSA, Yann Vincent.
IVECO
Por su parte, el fabricante italiano de vehículos industriales Iveco también volverá a subir la persiana en sus fábricas de Madrid y Valladolid, después de que decidiese retrasar la apertura, prevista para el 4 de mayo, ante «la dificultad que existe para garantizar el aprovisionamiento de piezas y material para llevar a cabo las tareas productivas con normalidad.
Fuentes de la empresa explicaron a Europa Press que estas dificultades en la cadena de suministro se justifican porque la mayor parte de los proveedores de piezas y componentes de estos centros se encuentra en el norte de Italia, una de las zonas más afectadas por la crisis del coronavirus.
No obstante, una vez subsanadas estas dificultades de suministro, las factorías de Madrid, con una plantilla de unos 2.300 trabajadores, y la de Valladolid, con unos 1.000 efectivos, retomarán este lunes su actividad.
Las fábricas de PSA e Iveco se convierten en las últimas plantas de fabricación de vehículos instaladas en España en volver al ‘tajo’ después de que todas paralizaran sus operaciones como consecuencia de las medidas adoptadas para luchar contra el coronavirus.
Las factorías de Renault en Sevilla, que produce cajas de cambios, y de motores de Valladolid fueron las más madrugadoras, ya que recuperaron de forma paulatina su producción desde el 14 de abril, mientras que las de vehículos de Renault en Valladolid y Palencia esperaron hasta el 29 del pasado mes de abril.
En el caso de las instalaciones que mantiene el consorcio alemán Volkswagen en España, situadas en Landaben (Pamplona) y en Martorell (Barcelona), la fecha elegida para esta desescalada fue el 27 de abril, al igual que el centro de Mercedes-Benz en Vitoria.
Respecto a Ford, la compañía estadounidense recuperó desde el 4 de mayo la producción en la planta de vehículos de Almussafes (Valencia), aunque anunció que no iniciaría hasta el 18 de mayo su operativa en la factoría de Motores.
En el caso de Nissan, el pasado lunes 4 de mayo se inició una huelga por parte de los trabajadores en la fábrica de Montcada i Reixac (Barcelona), donde estaban llamadas a trabajar unas 110 personas. Ese día estaba previsto que se retomase la actividad después de siete semanas con la fábrica de la Zona Franca de Barcelona parada debido al coronavirus.