Mark Deen y Helene Fouquet para Bloomberg
Un Airbus SE A380 superjumbo, operado por Air France, fue forzado a hacer un aterrizaje de emergencia en el este de Canadá, después de que uno de sus cuatro motores explotó sobre el océano Atlántico.
La aeronave volaba de París a Los Ángeles cuando ocurrió el “serio incidente”, que obligó a los pilotos a aterrizar en Goose Bay, Labrador, indicó la aerolínea este domingo en un comunicado.
Nadie en el vuelo 66 de Air France resultó herido y ya se hicieron los arreglos para llevar a los 497 pasajeros a California, aseguró la línea aérea. Airbus y la Oficina de Investigación y Análisis para la Seguridad de la Aviación de Civil de Francia enviaron a un grupo de expertos a Canadá, para investigar qué ocurrió.
El incidente obligó a los pilotos a aterrizar en Goose Bay
Aunque no es común que los motores se averíen, los llamados fallos no contiguos sí lo son. Estos se dan cuando se desgarra la parte externa que protege a la planta de poder. Averías como éstas son bastante serias porque pueden provocar un daño catastrófico en el ala que sostiene el combustible o en el sistema hidráulico que controla a las alas.
Las turbinas del jet de Air France las fabrica Engine Alliance, un emprendimiento conjunto entre General Electric y la corporación Pratt & Whitney. La empresa indicó en Twitter que está al tanto del incidente y que se encuentra investigándolo.
Las fotografías publicadas en Internet por los pasajeros mostraron que el exterior de los motores, ubicados debajo del ala derecha, tenían un daño pronunciado y que faltaba todo el anillo frontal del carenado.
Pratt y Whitney, que pertenece a United Technologies, se encarga de equipar al Airbus A320neo con motores actualizados, mientras que GE y su socio Safran ofrecen un producto rival.
El incidente es el más severo desde que, en 2010, Qantas Airways aterrizó su avión A380, después de la explosión de uno de los motores durante un vuelo. La planta de poder de la aeronave fue fabricada por el grupo Rolls-Royce, cuyo modelo Trent 900 es el otro motor de elección en el A380. El jet de Qantas estuvo fuera de servicio por 18 meses mientras se hacían varias pruebas y reparaciones.
El A380 está entre los cada ves más raros tipos de aviones de pasajeros accionados por cuatro motores. Las otras dos aeronaves similares que siguen en uso son el Boeing 747, así como el A340, que ya no se produce. Las aerolíneas ahora prefieren los modelos de dos motores, porque son más eficientes en combustible y más fiables.
Aviones como el Airbus A350 está certificados para volar por muchas horas con un solo motor, para poder alcanzar el aeropuerto más cercano y hacer aterrizajes de emergencia, de ser necesario.
Después de una década de servicio, Airbus ha disminuido la producción del A380, la aeronave de pasajeros más grande del mundo, a sólo uno por mes. Air France opera 10 de estos aviones. El mayor usuario de esta nave es Emirates, que solía operar sólo con turbinas de Engine Alliance, pero se ha comenzado a cambiar a los modelos de Rolls-Royce.