La caída del precio de la electricidad del 36% este mes de abril como consecuencia de la caída del consumo industrial por la crisis del coronavirus, la meteorología y los bajos precios del petróleo no se trasladará a los clientes que cuenten con una tarifa fija.
Así lo asegura la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en un comunicado en el que denuncia que las continuas bajadas del precio de la electricidad en el mercado mayorista no se han trasladado a los clientes que cuentan con una tarifa fija.
De hecho, pese la disminución del 36% del precio de la luz respecto al pasado mes de marzo y del 65% respecto a abril del año pasado, estos clientes verán aumentar hasta en 14 euros de media su factura de este mes.
Por el contrario, para los clientes con la tarifa regulada o cualquier otra que tenga como referencia la evolución del mercado mayorista, esta bajada del precio de la luz se traducirá en una reducción media de la factura de abril de cinco euros, respecto a la factura del abril del pasado año.
Este ahorro es el resultado de restar a los 14 euros del ahorro obtenido por el bajo precio de la electricidad del mes de abril respecto al mismo mes de 2019, los cerca de nueve euros extra que supone el sobreconsumo derivado del confinamiento, según explica la OCU.