Con Bankinter este jueves, da comienzo la temporada de resultados empresariales del sector bancario en España. El aluvión vendrá en 28 y el 30 de abril, cuando Santander, Bankia, BBVA, Sabadell y CaixaBank presenten cuentas del primer trimestre.
Los analistas coinciden, se espera un descenso en los resultados de la banca entre enero y marzo, pero se será aún mayor durante los próximos trimestres. Hasta el estallido de la crisis, el sector ha mantenido su actividad, lo que podría ayudar a presentar unas cuentas mejor de lo esperado.
En este sentido, Joaquín Robles, analista de XTB explica que Europa se enfrenta a una recesión profunda que generará un menor negocio bancario. El Banco Central Europeo y los diferentes gobiernos se han visto obligados a presentar planes de estímulo a gran escala para mitigar los efectos de esta crisis, lo que mantendrá los tipos de interés bajos más tiempo.
Pero la mayor amenaza de la banca, y lo que más impacto tendrá sobre sus resultados serán las provisiones millonarias para cubrir los préstamos incobrables que se generarán durante esta crisis. En los últimos días se ha visto como los cinco bancos que han presentado cuentas en EEUU han provisionado 25.000 millones de dólares, y allí la paralización económica llegó más tarde.
LOS INGRESOS PUEDEN CAER UN 50%
Las provisiones irán aumentando durante los próximos trimestres, y el pico se espera durante el segundo semestre de 2020 y 2021. Un aumento en los préstamos incobrables conlleva una menor rentabilidad, y las provisiones también se traducen en un menor beneficio. Pero los reguladores europeos han flexibilizado las normas para evitar un fuerte aumento de las reservas, de hecho han aconsejado a la banca no aplicar las reglas contables de manera estricta.
Por su parte, Sergio Ávila de IG destaca que el escenario de tipos 0% seguirá haciendo mella en el margen de intereses del sector. También se espera que los ingresos hayan caído y que puedan seguir cayendo, debido a que gran parte de los ingresos vienen de las comisiones.
También es “evidente” que los objetivos que tenían los bancos para el año sean difíciles de cumplir, por lo que habrá que estar pendientes de las informaciones que puedan lanzar en ese sentido. En su opinión, los ingresos podrían caer este año entre el 25% y el 50%, ya con el confinamiento se están dando muy pocos créditos al consumo.
SANTANDER Y SABADELL TIENEN MENOS MARGEN
La analista de Renta 4, Nuria Álvarez considera que “el golpe fuerte” será en abril. Pero durante estos tres meses las cifras van a mostrar una evolución normal en línea con las estrategias de 2020 y no van a recoger “un impacto real” del virus. Donde sí se verá reflejado es en las dotaciones extraordinarias. Igualmente, será un movimiento adelantado a lo que va a venir, no porque se haya visto el efecto.
Este incremento de provisiones afectará en la parte baja de la cuenta y con ello caerá el beneficio neto del primer trimestre, unas caídas que serán de doble digito. Los bancos que están más fuertes para las provisiones son los domésticos: Bankiner, Bankia o Liberbank “tienen niveles de capital más altos y sólidos”.
Pero la cuestión está en cuánto pueden soportar las entidades para llegar a los niveles de capital a final de año, aquí Santander y Sabadell son los más perjudicados porque tienen menos margen para dotar provisiones.
Sin tener en cuenta las provisiones, el margen de intereses de Bankia va a ser “el más flojo” porque todavía recoge el Euribor del año pasado antes de la recuperación de este 2020. Su parte alta de la tabla va a ser “más débil” que otros bancos, añade.
¿Y CUANDO ACABEN LOS ICO?
Según la analista de Renta 4, los créditos avalados por el ICO van a ser un soporte para la evolución del crédito durante estos meses, que en líneas generales y más allá de esto ha caído “y aquí una cosa compensa a la otra”. Será en el cuarto trimestre cuando se vea la evolucion real sin estos avales que acaban en septiembre.
Por otra parte, los bancos que tienen el negocio más diversificado, como BBVA o Santander se verán afectados por la fuerte depreciación de las divisas. Pero aún no van a notar (en términos de volumen de negocio) el impacto del covid-19 en los países emergentes, porque la pandemia llegó a México o Brasil todavía más tarde que en España.
Sin embargo, estos países aún no tienen medidas de confinamiento y la incertidumbre sobre lo que pueda ocurrir será más alto. Por ello, el Banco Santander ha dicho que sus objetivos no se van a cumplir este año, lo mismo que su estrategia. Una decisión que ha adoptado también en Estados Unidos.
De cara a final de año todos los bancos parten de unos niveles que les permiten aguantar, pero no va a ocurrir lo mismo en 2021, con un crecimiento negativo del PIB, una base de capital menor el impacto de la morosidad, concluye.