Estas vacaciones pasarán a la historia en el ámbito de la tecnología móvil. Por primera vez los ciudadanos europeos no han tenido que preocuparse de las llamadas que hacían cuando viajaban o si se conectaban a internet. La UE decidió quitar el pasado mes de junio los sobrecostes que imponían los operadores a sus clientes cuando estaban fuera de sus países de residencia. Para algunos, como es el caso de Lycamobile, supone algo más por su grado de especialización.
Este OMV, cuyo nicho está en los clientes internacionales, o como se denomina dentro de sector telco: operador étnico, se enfrentaba a un verano diferente. De sus casi 2 millones de usuarios que tiene en España, la gran mayoría no son residentes. Además, es muy habitual ver un puesto de Lycamobile en aeropuertos y demás lugares de tránsito de turistas, puesto que se trata de una marca internacional con reconocimiento en el negocio.
Así pues, llegados el mes de septiembre, toca hacer balance sobre cómo le ha ido a la compañía tras la muerte del roaming. Y los resultados son algo contradictorios.
Por un lado, con los datos de portabilidad en la mano, no hay buenas noticias. En julio, Lycamobile tuvo un saldo neto negativo de 3.900 clientes. Y en agosto la situación ha sido similar, puesto que el operador ha perdido 3.800 usuarios. Esta pérdida se puede deber al hecho de que algunos de sus clientes internacionales ya no tengan problema en estar con otro operador que, por ejemplo, esté asociado a su oferta convergente. De este modo no deberá tener una segunda línea.
Lycamobile se muestra optimista
La versión del operador es más optimista y resta importancia a las cifras por su estructura de negocio. Según cuentan fuentes de la compañía a Merca2.es, “muchos de los clientes son extranjeros o con familia en el extranjero. Pero buena parte de ellos no son de la Unión Europea. En este sentido la llegada del roaming no se ha notado mucho”.
Lycamobile, añaden, sigue vendiendo bonos y tarjetas para ciudadanos que quieren comunicarse con fu familia en Ecuador, México o Marruecos y buscan precios competitivos.
Por lo que respecta a la demanda de ciudadanos españoles que viajan al extranjero o europeos cursando Erasmus en nuestro país, otro de los públicos clave para la compañía, “Lycamobile ha reaccionado aplicando el roaming a tres de sus bonos más vendidos, los que incluyen datos y llamadas ilimitadas”. Es decir, precisamente ha ido a cubrir las tarifas que generan un conflicto con el final del roaming. Y es que no todo relucía con el fin de los sobrecostes.
Desde Bruselas, con el fin de que no hubiera un abuso con la nueva situación, llevó a cabo una serie de cálculos mediante los cuales había limitaciones a las tarifas con mucho consumo. Por eso, Lycamobile busca con esos bonos seguir captando clientes, puesto que las cifras este verano, sea consecuencia directa del roaming o no, han sido negativas.