La Coca Cola es una de las bebidas más consumidas a lo largo y ancho del planeta. Pero, ¿significa eso que esté bien tomarla de forma tan habitual? Como es lógico, tomarse una de vez en cuando no tiene problema, pero los problemas vienen cuando esta se consume de forma diaria y sin ningún tipo de control.
De hecho, es una de las bebidas más altas en azúcares. Eso la convierte en muy adictiva, pues el azúcar es una de las sustancias que más adicción crean en nuestro organismo. Si comenzamos a consumirla de forma descontrolada, cada vez necesitaremos más y más.
Después de leer este artículo, lo más seguro es que te replantees si de verdad merece la pena tomarte esa Coca Cola diaria. Descubre qué ocurre si la tomas día a día. Créenos: los resultados no son buenos.
1La báscula, el lugar donde primero notarás el efecto de la Coca Cola
Que la Coca Cola engorda (y mucho) no debe ser un secreto para nadie. Es una de las bebidas que se comercializan en el mercado que contienen más azúcares. Cada lata de solo 33 ml contiene nada menos que 39 gramos de azúcar. Es decir, el equivalente a 10 terrones.
Una buena alternativa es la opción Zero. Esta contiene tan solo 0,3 gramos de la misma. Además, nos hace subir de peso porque presenta un alto índice glucémico y muy baja saciedad. A pesar de todo el azúcar que contiene, después de bebernos una lata seguimos teniendo hambre.
Según la ciencia, reducir de forma diaria una lata de esta bebida nos puede ayudar a perder hasta 0,7 kg de peso. Esos kilos adquiridos si seguimos bebiendo de forma diaria van relacionados con problemas de salud como la diabetes tipo 2. Por tanto, no debemos dejar de tomar esta bebida solo para perder peso, sino también hacerlo para cuidar nuestro organismo y protegernos.