En tiempos de confinamiento por el coronavirus, de estar en casa para salvar la salud propia y la de los demás, el uso de aplicaciones que nos pueden hacer más fácil la vida se dispara. Cierto que las farmacias son uno de los servicios que siguen al pie del cañón. Pero no menos cierto es que, por miedo, por utilidad, o por cualquier otra razón, preferimos usar una aplicación.
Varios son los apartados en los que las compras online se ha disparado desde comienzos del mes de marzo. En concreto, y respecto al denominado como gran consumo, dicho comercio aumentó sus ventas un 59% en la semana del 9 al 15 de marzo, según Nielsen.
La farmacia no se ha quedado atrás. Es el caso de la app de farmacias.com. En sólo tres días, superó las 10.000 solicitudes. Y quien se la descargó no lo hizo únicamente para comprar a distancia y recoger los medicamentos sin esperas, o que se los manden a casa. También se utilizó para ver cuál era la farmacia más próxima, o para consultar el stock del producto que en ese momento se necesitaba.
Las app de farmacias nos pueden servir para no tener que hacer cola a la hora de recoger los productos
Lo curioso de esta app es que su puesta en marcha fue hace una semana. Dicha app se encontraba en fase de desarrollo. Pero debido a la aparición del coronavirus, se aceleró su puesta en funcionamiento. Los usuarios, con su utilización, también reducen los riesgos de exposición y contacto.
De esta manera, los usuarios tienen a su alcance poder consultar cuál es la disponibilidad de los cerca de 30.000 productos que integran su catálogo. No sólo eso. Las 22.200 farmacias de España también pueden acceder a su tecnología.
FARMACIAS PARA TODOS
No sólo para adquirir medicamentos. Existen otro tipo de aplicaciones de farmacias que pueden ser útiles en estos momentos de cuarenta por el Covid-19. PharAPP, por ejemplo, tiene un servicio de alertas para los pacientes.
El cliente compra los medicamentos. El farmacéutico los registra en el programa. Y el cliente recibe alertas sobre sus tomas con independencia del tipo de medicamento y su forma de administración.
El universo farmacéutico no está tan desarrollado como podría parecer, sobre todo en lo que se refiere a la relación entre farmacia y paciente. Entre estos últimos, y si se tienen niños, una app que puede ser la mar de útil es Babymecum.
Esta aplicación sirve para poder desatascar un embrollo que, en ocasiones, se da en la unidad familiar. Y dicho embrollo no es otro que saber qué cantidad hay que darle a un bebé o a un niño de un determinado medicamento: Apiretal, Dalsy, Dastosín… Seguro que el pediatra dijo cuál era dicha cantidad, pero por los motivos que sean, es posible que se acabe olvidando en algún rincón del cerebro. Dicha app pedirá cuál es el peso del niño o la niña para así descubrir la cantidad exacta que necesita. De esta manera, se reduce la posibilidad de errar. Y no hay que ir a las farmacias para preguntar.