Las alianzas entre el negocio bancario y los nuevos jugadores tecnológicos constituyen la «clave» de la evolución en medios de pago para mejorar la competitividad del sector frente a los retos derivados de la llegada del ‘Open Banking’, el modelo de negocio que facilita el intercambio de datos entre entidades a partir del reconocimiento de los clientes como propietarios de su información financiera.
Así lo destaca el ‘IX Informe de Tendencias de Medios de Pago’, presentado por Minsait Payments (Indra), empresa que agrupa todos sus productos, soluciones y servicios de medios de pago y los más de 1.000 profesionales especializados de Minsait, aplicando un modelo que busca «incrementar su agilidad comercial y lograr una mayor flexibilidad estratégica».
Minsait Payments, con su nueva estructura, busca potenciar la innovación en nuevos productos y modelos de negocio especializados, ganar escala en el negocio de emisión y diversificar su oferta en adquirencia, así como potenciar una oferta única, diferencial y de alto valor añadido basada en servicios digitales para medios de pago construidos en torno al dato y la analítica y el empleo de algoritmos ‘machine learning’.
Con ello, busca también «aumentar su liderazgo en los mercados de España y Latinoamérica», así como aprovechar al máximo el potencial del mercado de medios de pago y alcanzar un crecimiento de doble dígito anual en sus ingresos para los próximos cinco ejercicios.
PROMOVER UNA REGULACIÓN DE COMPETENCIA DIGITAL
El infome de Minsait Payments ha sido realizado con la colaboración de Analistas Financieros Internacionales (AFI) y ha incluido las opiniones de más de 45 directivos del sector bancario y más de 4.000 encuestas a la población bancarizada de España, Portugal, Latinoamérica y Reino Unido, país que se incorpora en esta edición por considerarse un «referente» en este mercado.
El estudio señala que la mayoría de los directivos opina que la promoción de una regulación de competencia digital y la creación de ecosistemas de colaboración con los nuevos actores para desarrollar nuevos modelos de negocio será la reacción que predomine en la industria bancaria.
Destaca, asimismo, el papel de los proveedores especializados como «motor» de estos nuevos ecosistemas por su capacidad para actuar como elemento intermediario entre el negocio y la tecnología, agilizar la puesta en marcha de nuevas tendencias o aportar conocimiento sobre la regulación de cada geografía.
PREDOMINA EL USO DE LA TARJETA
En España, la tarjeta sigue considerándose el medio de pago electrónico principal por el 60% de los internautas bancarizados, al igual que en 2018, lo que podría apuntar a un posible estancamiento futuro.
Existe también en el país una alta proporción de compradores ‘online’, que han triplicado el volumen de facturación desde 2013. Las operaciones de pago con tarjeta han crecido casi un 70% en los últimos cinco años y en la actualidad dos de cada tres operaciones de pago electrónico en nuestro país se hacen a través de este medio.
Por otro lado, se acelera en España la tendencia global que intensifica el uso de las tarjetas como medio de pago directo en el punto de venta (POS) frente a la retirada de efectivo en cajeros automáticos (ATM).
En conjunto, el número de operaciones de pago realizadas en España con tarjetas en los POS aumentó considerablemente en 2018 (13,6%), una tasa de crecimiento superior y muy alejada de su equivalente de uso en cajeros, que apenas creció un 0,1%.