El Tesoro Público ha colocado este jueves 4.957 millones de euros en bonos y obligaciones del Estado, en el rango medio previsto, y lo ha hecho profundizando en los tipos negativos en los bonos a 3 años y las obligaciones a 10 años indexadas, al tiempo que ha empezado a cobrar por las obligaciones con vida residual de 6,3 años y ha bajado la rentabilidad en obligaciones a 10 años.
De esta forma, el organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha vuelto a obtener la confianza de los mercados en la primera emisión tras la formalización del proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit). De hecho, la demanda ha alcanzado los 11.880 millones de euros, 2,4 veces mas de lo finalmente adjudicado.
En concreto, ha emitido 1.600 millones de euros en bonos a 3 años, con cupón del 0%, frente a una demanda de 4.700 millones de euros, registrando un tipo de interés marginal del -0,290%, más negativo que el -0,222% de la subasta del pasado 23 de enero.
Con las obligaciones con vida residual de 6,3 años, con cupón del 1,95%, ha colocado 1.139,6 millones de euros, frente a una demanda de 2.784,63 millones de euros, y ha empezado a cobrar a los inversores, ya que el tipo ha entrado en terreno negativo (-0,009%), cuando la referencia era el tipo del 1,606%, que no se subastaba desde el 16 de junio del año 2016.
Además, ha captado 525 millones de euros, frente a una demanda de 1.741 millones de euros, con las obligaciones a 10 años indexadas, con un tipo marginal del -0,907%, más negativo que el -0,807% de referencia del pasado 3 de octubre del año pasado.
Por último, con las obligaciones a 10 años ha logrado captar 1.692 millones de euros, ante una demanda de 2.654 millones de euros, y ha registrado un tipo del 0,354%, más bajo que el interés del 0,414% de referencia de la puja del 21 de noviembre de 2019.
Tras la subasta de este jueves, el Tesoro Público regresará a los mercados el martes día 11, cuando celebrará otra emisión letras a 6 y 12 meses; otra el martes 18 de letras a 3 y 9 meses y una última el jueves día 20, en este caso de bonos y obligaciones.
Para 2020, el Tesoro prevé realizar una emisión neta de deuda pública de 32.500 millones de euros, lo que supone un 7,1% menos respecto a la estrategia del año pasado, pero un 62,8% más respecto a los 19.960 millones finalmente emitidos a cierre de 2019.
La estrategia de financiación de este año contempla una emisión bruta de deuda pública de 196.504 millones para este año, un 6,2% menos que la estrategia de 2019 y prevé obtener toda la financiación neta a través de la emisión de instrumentos a medio y largo plazo. Además, el organismo prevé la emisión de su primer bono verde a 20 años en la segunda mitad del ejercicio.