Tras unos días de tradicional y vacía polémica, en la ciudad condal lo tienen claro: “El mejor de la historia”. Con esta rotundidad se ha manifestado el Ayuntamiento de Barcelona sobre la próxima edición de Mobile World Congress que se celebra a partir del 24 de febrero en la capital catalana. Aunque los eventos empiezan el fin de semana previo. En este marco, la propia organización del evento también ha tomado medidas extraordinarias -por primera vez- en materia de seguridad.
En concreto, este año se ha aplicado un nuevo nivel de seguridad en el registro de asistentes para la feria. Así, como parte de los esfuerzos coordinados de seguridad alrededor del MWC2020, los Mossos d´Esquadra han solicitado la recopilación de detalles de identificación personal de los asistentes al Mobile para fortalecer los planes de seguridad. Siempre se había hecho, pero ahora debe haber identificación física del documento precia para un mejor registro.
Además, sin dicha autenticación el registro no se dará por concluido. Desde la organización explican que se trata de un control nuevo implantado este año para garantizar unos mejores controles de seguridad. Aseguran desde la patronal GSMA que todo surge “como parte del plan general de seguridad en toda la ciudad”, en un trabajo conjunto con los Mossos para identificar y abordar posibles amenazas de seguridad. Estiman desde la organización del Mobile World Congress que recopilar la identificación de los asistentes es un medio para mejorar el plan de seguridad general.
Por lo que respecta a los datos recopilados, la GSMA conservará los datos relacionados con la identificación hasta el 23 de marzo de 2020; en ese momento, todos los datos personales serán eliminados, aunque para cuestiones concretas de eliminación de datos, habrá que tratar directamente con la organización.
LA OBSESIÓN DE BARCELONA CON EL MOBILE
Junto con estas aplicaciones extras de seguridad, el Ayuntamiento de Barcelona, por su parte, ha creado un comité ejecutivo organizador para anticiparse y garantizar que la edición de este año del Mobile World Congress sea la «mejor de la historia».
De esta manera se escenifica la preocupación que hay sobre el devenir del evento, tanto a nivel de seguridad como organización. Y es que todavía andan recientes los altercados producidos tras la sentencia del “procés”; y el miedo latente a que pueda suceder algo durante la celebración de la feria, sigue presente.
Por ello, el comité se ha constituido para la edición de este año y lleva reuniéndose desde el mes de diciembre para «coordinar esfuerzos» y abordar conjuntamente los aspectos organizativos, logísticos y de servicio del salón. Este órgano de coordinación institucional está integrado por el Ayuntamiento de Barcelona y el de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona); la Generalitat, y el Gobierno.
El alcalde Collboni ha remarcado que «Barcelona está preparada» para acoger un año más el MWC, y ha asegurado que han trabajado para que no haya ningún problema con su organización, el transporte y la seguridad y todo salga perfecto. Ha sostenido que quieren que la noticia del MWC «sea lo que pasa dentro» y no lo de fuera, como preguntarse si el salón se irá a otra ciudad o si hay huelgas de metro, bus y taxis.