¿Cuáles son los 8 gigantes que dominan el mundo tecnológico?

Uno de los temas más discutidos es el creciente poder financiero, la influencia social y la omnipresencia de las cinco compañías tecnológicas más grandes de los Estados Unidos. Son verdaderas máquinas de hacer dinero.

Pero no seamos miopes al reunir a estos monstruos tecnológicos. Vamos a acostumbrarnos a ver todo el bosque.

No son solo los cinco gigantes estadounidenses: Amazon, Apple, Facebook, Google y Microsoft, sino también las tres superestrellas de Asia: Alibaba y Tencent de China, y Samsung de Corea del Sur. Los tres son todopoderosos en sus países de origen, y cada vez son más ambiciosos. Quizá incluso más que sus homólogos norteamericanos.

Los 8 grandes Merca2.es

Estas tres empresas han escalado entre las compañías más grandes. Los cinco gigantes estadounidenses y los tres asiáticos ocupan ocho de las 13 primeras posiciones de las compañías más valiosas del mundo. Hasta hace dos años, solo uno de estos titanes asiáticos estaba entre los primeros 30, según datos de Bloomberg. En este momento, Alibaba va bien encaminada en su propósito de superar a Amazon como el mayor minorista de comercio electrónico del mundo por capitalización de mercado.

Tencent ha multiplicado por 441 el precio de sus acciones desde que salió a cotizar en la Bolsa en el año 2004

La élite de los ocho -¿se trata de un buen apodo?- operan en diferentes rincones del mundo, pero cada uno ejerce una enorme influencia en el mercado de consumo, y tienen su mira puesta en el cambio de los hábitos tecnológicos a escala global.

Alibaba y Tencent, particularmente, han crecido con mayor rapidez que los gigantes tecnológicos estadounidenses. Para dar sólo un ejemplo: las acciones de Alphabet han multiplicado por 22 el precio en que la compañía lanzó su oferta pública inicial en agosto de 2004, cuando se llamaba Google. El precio de los títulos de Tencent, que lanzó sus papeles en Hong Kong un par de meses antes que el buscador de Internet, se ha multiplicado por 441.

Tencent Merca2.es

Tanto Alibaba como Tencent encabezan la ola de la rápida adopción de Internet en China. En 2006, 10,5% de la población tenía acceso y para 2016, el número se elevaba a 50%, según el Centro de Información de la Red de Internet en China.

Samsung ya es una empresa global, mientras que Tencent y Alibaba generan la mayoría de sus ventas en China, pero las dos se han movido hacia India, el sudeste asiático y otros puntos donde crece el mercado tecnológico.

Hay aspirantes a entrar en estos grupos de gigantes tecnológicos como Softbank o Uber

Alibaba y Tencent han hecho inversiones en cada rincón de la tecnología, como por ejemplo, la apuesta de Tencent en Tesla en los Estados Unidos o el interés de Alibaba en una compañía de comestibles en línea en la India, parecido a lo hecho por Amazon con Whole Foods.

Es justo pensar que el futuro del uso de la tecnología y los efectos resultantes en las economías y los mercados de trabajo estarán en manos de estos ocho titanes, y tal vez otros aspirantes como SoftBank o Uber.

Brad Stone, de Bloomberg News, escribió a principios de esta semana que la asombrosa condena al heredero del imperio de Samsung puso de relieve cómo el sentimiento popular en Corea del Sur se ha vuelto contra el conglomerado y otros titanes corporativos, un grupo que es conocido como el chaebol. Los gigantes tecnológicos de los Estados Unidos se han convertido, a su vez, en pararrayos de las críticas, tanto del extremo izquierdo como del derecho en el espectro político.

Los tropiezos de Facebook en la India son muestra de que no siempre se encuentran con un público de brazos abiertos

La reacción contra los chaebols debe ser una advertencia para todos los miembros de la élite de los ocho a medida que se expanden. Los tropiezos de Facebook en India demostraron que cuando las empresas tecnológicas de gran alcance van al extranjero no siempre se encuentran con brazos abiertos. Tencent y otras compañías chinas se apegan al Gobierno a la hora de las censuras en Internet. Eso puede no ir bien para Tencent que se encarga de viajar por  el mundo con sus usuarios a través de su servicio. Y puede que no se necesite demasiado para que el germen de la insatisfacción se convierta en un tsunami que golpee a todas las superpotencias.