El consumo excesivo de azúcar puede provocarte diabetes tipo 2. Cuando tienes altos los niveles de azúcar en el torrente sanguíneo, la insulina, que es la hormona que se encarga de hacer que la glucosa entre en las células para proporcionarte energía, no va a poder con toda. Eso conlleva que el organismo tenga azúcar extra circulando por él con todos los problemas que ello acarrea.
Hay personas que piensan que, cuando dejas de hacer algo por veintiún días, deja de convertirse en un hábito y la adicción cesa. Hay personas que tienen adicción a la azúcar entrando en riesgo de tener sobrepeso u obesidad. Esto a su vez aumenta los factores de sufrir enfermedades cardiovasculares o cerebrovasculares.
Es necesario reducir la ingesta de azúcar y esto puede provocarte incluso un síndrome de abstinencia. Cuando no tomas azúcar estás de mal humor y tendrás picos de glucosa que harán que busques alimentos con azúcar desesperadamente.
Para lograr minimizar la ingesta de productos azucarados hay una serie de trucos que, si los sigues, puedes hacer que tu calidad de vida mejore considerablemente.
Engaña al azúcar
Esto te podrá resultar un tanto extraño, pero realmente es efectivo. Al igual que las personas que quieren fumar menos se ponen metas o tiempos, cuando eres adicto al azúcar puedes hacer lo mismo. Ponte retos. Si vas a comer un dulce antes haz algo. Como por ejemplo, no lo vas a probar hasta que hagas 30 abdominales o andes media hora. Cuando acabes de hacerlo seguramente ya no tengas ganas de comerlo.
También puedes cambiar el azúcar por otras cosas, como infusiones o fruta. La fructosa de la fruta es mucho mejor que el azúcar de los dulces. Eso podrá engañar a tu cerebro un rato y que se te pasen las ganas de comerlo. Beber un vaso de agua también es una opción rápida y saludable.
Comer regaliz, negro, el rojo de azúcar no sirve, o masticar chicle, sin azúcar, puede hacer que mantengas la boca cerrada un rato.
Hábitos
Es necesario cambiar los hábitos y las costumbres, como ya te he dicho. Si haces algo o dejas de hacerlo durante más de veinte días consigues desintoxicarte. Si eres de los que toman azúcar con café en vez de al contrario debes ir disminuyendo poco a poco. En vez de cinco cucharadas pasa a cuatro y así poco a poco hasta que al final puedas tener una ingesta normal. Es mejor acostumbrarse al sabor natural de los alimentos y olvidar los aditivos.
Si en el postre estás acostumbrado a comer un dulce intenta cambiarlo por las infusiones que te dije antes o por frutas. Sí, no es lo mismo, pero no te seguirás obstruyendo las arterias. El que algo quiere, algo le cuesta.
Evita la tentación
Cuando te da alergia el polen no vas a una floristería a olerlas, pues con el azúcar pasa lo mismo. Si sabes que tienes predilección por las comidas azucaradas intenta no ir a las pastelerías y evita los pasillos que contienen bollería industrial cuando vayas al supermercado.
Un truco para evitar la tentación y los antojos de cosas con azúcar es ir a comprar con la barriga llena. Si no tienes hambre, los ojos no se te irán detrás de los dulces y gastarás menos dinero.
Deja el azúcar para ocasiones especiales. No es que se te vaya a olvidar el sabor de una tarta; si quieres, y de forma ocasional, puedes consumirla, pero no a diario.
Beneficios de dejar el azúcar
Para poder dejar el azúcar con más facilidad lo primero que tienes que hacer es concienciarte de que es lo más saludable para ti. Si no crees que comer un kilo de azúcar al día sea perjudicial no comprenderás el porqué tienes que dejarlo y te costará más trabajo.
Es importante saber que nada en exceso es bueno. Cuando tomas mucho azúcar tu organismo se descontrola por completo. No duermes bien, estás todo el día cansado, tienes subidas y bajadas anímicas y los kilos de más pueden acabar también con tu salud mental.
Si no estás conforme con tu cuerpo, la depresión es algo que llega tarde o temprano. No sirve de nada deprimirte y ponerte a comer en modo cochinito para ahogar las penas en dulces.
Lo cierto es que, a no ser que tengas diabetes, no tienes que dejar de comerla del todo. Y si la tienes, con llevarla bajo control es suficiente. Debes mentalizarte de que conseguir reducir la ingesta de azúcar tan solo te aportará beneficios, tanto a corto como a largo plazo.
