La Conferencia sobre el Cambio Climático de Naciones Unidas se celebrará finalmente en Madrid entre el 2 y el 13 de diciembre. Esta celebración iba a ser en Chile pero se anuló por las protestas.
Unas protestas que Antonio Cortina, director adjunto del servicio de estudios de Banco Santander percibe como “un caso de éxito” en términos globales. Y entiende que ha habido un “efecto contagio” tras las de Barcelona y Hong Kong. Así lo explicaba en el Foro Latibex donde se ha hablado del futuro de América Latina.
El Santander concentra un 46% de su negocio en Latinoamérica y a cierre del tercer trimestre, registraba unos beneficios en Chile de 473 millones de euros, esto es un 6% de su negocio total.
Cortina explicaba que las tensiones sociales en el país “no solo” se han producido en rentas bajas “también en altas”. Y hay descontento social por el surgimiento de nuevos partidos. “Lo mismo que ocurre en Francia”.
ESTO NO ES NUEVO
Además, en Chile había “malestar desde hace tiempo”. Y como resultado de la globalización, una parte importante “se sentía en una situación precaria”. Pero ya había un sustrato de descontento por las pensiones y el acceso a los servicios sociales.
En este sentido, hablaba de una educación de mala calidad o la sanidad, donde predominan largas listas de esperas. “La desigualdad ha aumentado” matizaba el del Santander. Por ello, si el coste medio del transporte urbano es de 36.000 pesos y deciden subirlo “unos pesos”, se generan protestas.
En su opinión, no hay una lucha “suficiente” contra el fraude fiscal. Y requieren una transformación institucional “muy profunda” que no saben cuánto va a durar y tendrá que ser refrendada. Si bien, el 40 % de la población gana entre 5,5 y 13 dólares al día, tiene empleos informales y temen volver por debajo del umbral de la pobreza.
Cortina, destacaba que en Chile se va hacia una economía menos liberal y con una intervención importante del sector público. Y en las protestas, se ha visto el “efecto contagio” de las manifestaciones en Barcelona o Hong Kong. Sin embargo, este país tiene margen para adaptar los tipos de interés y espera un crecimiento modesto, pero mayor conforme al conjunto de la región.
ARGENTINA: ESCENARIO MEJORABLE
El director adjunto del servicio de estudios del Santander, también ha destacado que en Argentina, donde la entidad cuenta con un 1% del negocio total y a cierre del último trimestre, registraba un beneficio de 97 millones de euros, “hay incertidumbre, pero también elementos para ser optimistas”.
Entre ellos, el resultado de las elecciones (donde Macri tiene fuerza), el yacimiento de Vaca Muerta, que le convierte en potencia exportadora de gas y la postura del Fondo Monetario Internacional, más relajada y dispuesta a cambiar las condiciones de su deuda.
Respecto a Brasil, donde el banco concentra la mayor parte de su negocio (un 29%, frente a un 15% de España) y hasta septiembre había alcanzado un beneficio de 2.249 millones de euros, la entidad ha revisado al alza las perspectivas de crecimiento. Y destaca que el proceso de reformas permitirá que la confianza mejore y el crecimiento vaya a más.
“El diagnóstico que se hizo años atrás no fue el correcto”. Se puso énfasis en el gasto, pero no había respuesta de la oferta. Y se expandió el gasto público y la deuda.