Jorge Javier Vázquez ha vuelto a demostrar por qué es una de las voces más influyentes de la televisión. Durante sus vacaciones navideñas, que este año lo llevaron a México y Guatemala, el popular presentador ha encontrado tiempo para reflexionar y compartir sus opiniones en el primer blog del año para la revista Lecturas. En esta ocasión, su atención se centró en las Campanadas de fin de año, un evento que generó gran debate mediático gracias a sus dos principales protagonistas: Cristina Pedroche y Lalachus. Como es habitual en él, Jorge Javier no dejó indiferente a nadie con sus comentarios.
1Lalachus, señalada
Desde el inicio de su texto, Jorge Javier abordó el clima de polarización que, según él, no solo domina la política, sino que también ha impregnado otros ámbitos, incluida la televisión. «Sigo desde la distancia la pelea por las Campanadas. La polarización en la escena política se ha trasladado también a la televisión. Se nos pide, casi se nos exige, que dejemos de ser espectadores para convertirnos en militantes», escribió. Sin embargo, él dejó claro que no está dispuesto a tomar partido en una rivalidad que considera innecesaria. «Me quedo con Lalachus y con Pedroche. Me niego a tener que escoger. El trabajo de ambas es digno de elogio», sentenció.
El presentador de El diario de Jorge no escatimó en halagos para ambas mujeres. En el caso de Lalachus, reconoció que «ha llegado y besado el santo», una expresión que refleja la rápida aceptación y éxito que la cómica ha logrado en un evento tan emblemático como las Campanadas. Por otro lado, también aplaudió a Cristina Pedroche, cuya elección de vestuario se ha convertido en un fenómeno que, año tras año, mantiene en vilo a millones de espectadores. «Detrás de cada una de ellas hay muchísimas horas de esfuerzo, trabajo, dedicación y compromiso», aseguró, destacando el valor de ambas profesionales en sus respectivos estilos.
Para Jorge Javier, el verdadero significado de la diversidad es la capacidad de apreciar el talento y el trabajo sin necesidad de elegir un bando. «La diversidad consiste en quedarse con las dos. Tomar partido por alguna de las dos significa hacerle el juego a los que nos quieren enfrentados. Pues no me da la gana«, afirmó con rotundidad. Sin embargo, también se permitió un comentario crítico sobre la tradición de las capas que las presentadoras usan para mantener en secreto sus vestidos hasta el último momento. «Lo de las capitas para proteger la sorpresa del vestido me queda ya un poco ridículo. Habrá que inventarse otra cosa. Ya suena a pescado congelado», comentó con su característico humor ácido.