Repsol: Resultados financieros y estrategia de crecimiento en un contexto desafiante
Beneficios netos y resultados ajustados de Repsol
Repsol ha anunciado un beneficio neto de 1.792 millones de euros en los primeros nueve meses del año, lo que representa una caída del 35,7% en comparación con el mismo período del año anterior. Esta disminución se debe principalmente a los bajos precios de los hidrocarburos y a menores márgenes de refino.
El resultado neto ajustado, que evalúa específicamente la salud de sus negocios operativos, se situó en 2.684 millones de euros, un 29,7% inferior respecto a los nueve primeros meses de 2023. Esta caída refleja los retos del mercado energético actual, donde la volatilidad de los precios está afectando a la rentabilidad de las grandes petroleras.
Contribución fiscal significativa
Repsol también ha informado que su contribución fiscal en España durante este período fue de más de 6.500 millones de euros, dentro de un total global de 9.462 millones de euros. Cabe destacar que, como parte de su compromiso con la responsabilidad fiscal, la compañía ha enfrentado un impuesto sobre beneficios con un tipo efectivo global del 34%. Este desempeño fiscal demuestra la importancia de Repsol en la economía española, proporcionando ingresos significativos al Estado y apoyando la creación de empleo.
Dividiendo y recompra de acciones: compromiso con los accionistas
Ante estos resultados, Repsol ha decidido acelerar su política de retribución a los accionistas. La compañía ha anunciado un dividendo en efectivo de 0,475 euros brutos por acción que se distribuirá en enero de 2025, lo que representa un aumento respecto a los 0,4 euros brutos por acción del año anterior. Esta decisión subraya el compromiso de Repsol de mantener una política de dividendos atractiva y sostenible, buscando distribuir entre el 25% y el 35% del flujo de caja operativo durante el período del Plan Estratégico 2024-2027.
Además, durante este año, la compañía ha ejecutado un programa de recompra de acciones que ha incluido la amortización de 40 millones de acciones propias, lo que representa el 3,29% de su capital social. Este movimiento no solo mejora la rentabilidad por acción, sino que también refuerza la confianza de los inversores en la dirección estratégica de la empresa.
Gestión de deuda y liquidez
A pesar de un entorno tan desafiante, la deuda neta de Repsol al cierre de septiembre se sitúa en 5.532 millones de euros, lo que representa un aumento de 937 millones de euros respecto a junio de este año. Este incremento se debe principalmente a las inversiones realizadas, al pago de dividendos, a la recompra de acciones y al segundo pago del gravamen temporal a las energéticas en España.
El ratio de apalancamiento de la empresa ha aumentado al 16,4%, en comparación con el 13,8% del segundo trimestre. Sin embargo, la liquidez de Repsol al cierre del tercer trimestre se ubica en 9.528 millones de euros, lo que equivale a 3,10 veces los vencimientos de deuda bruta a corto plazo, lo que garantiza la flexibilidad financiera de la empresa para afrontar futuros desafíos.
Progresos en energías renovables y objetivos estratégicos
Repsol ha continuado avanzando en su Plan Estratégico 2024-2027, con un enfoque claro en la transición hacia un modelo productivo más sostenible. En este sentido, la compañía ha puesto en marcha su primera planta dedicada exclusivamente a la producción de combustibles 100% renovables a escala industrial, un hito importante en su compromiso con las energías limpias.
Ventas de combustibles renovables en crecimiento
Durante este ejercicio, Repsol ha vendido más de 33 millones de litros de combustibles renovables, y tiene como objetivo alcanzar 600 puntos de venta al final del año, con la meta ambiciosa de llegar a 1.500 puntos de venta en 2025. Estos esfuerzos son parte de la estrategia de la compañía para diversificar su cartera de productos y reducir su huella de carbono.
En el ámbito de las energías renovables, la empresa ha instalado 897 megavatios (MW) de capacidad de generación solar y eólica en el último año, principalmente en España y Estados Unidos. Esta expansión ha contribuido a que la producción eléctrica con energías renovables casi se duplique en el tercer trimestre, alcanzando 1.587 gigavatios hora (GWh). Cabe destacar que la capacidad instalada de generación de electricidad solar y eólica de Repsol alcanzaba 2.464 MW, evidenciando un aumento del 57% en solo un año.
Cliente digital y liderazgo en el mercado
El crecimiento de Repsol no solo se limita a la producción de energía, sino que también se refleja en su base de clientes. En la actualidad, Repsol cuenta con 2,4 millones de clientes de electricidad y gas en España y Portugal, lo que representa un 11% más que el cierre del año anterior. Además, la empresa se ha posicionado como el cuarto operador del mercado eléctrico en España, lo que resalta su importancia en el sector energético del país.
La app Waylet ha visto un crecimiento significativo, alcanzando cerca de nueve millones de usuarios digitales únicos. Esto no solo mejora la interacción del cliente con la marca, sino que también impulsa las ventas a través de canales digitales, un aspecto crucial en la economía actual.
Infraestructura de recarga: el futuro de la movilidad
Repsol ha invertido en más de 2.500 puntos de recarga pública instalados en España, con 1.970 operativos actualmente. Sumando acuerdos con terceros, la compañía ofrece una red de más de 5.000 puntos de recarga de acceso público, permitiendo un desarrollo sostenible de la movilidad eléctrica y apoyando la transición hacia un modelo de transporte más limpio.