La cotización de la constructora San José acumula una subida del 32,25% desde enero hasta el 15 de octubre, lo que la aúpa como la mejor del sector entre las presentes en el Ibex-35 y el Mercado Continuo.
La tendencia positiva de la empresa gallega presidida por Jacinto Rey está asentada, según los analistas, en la aprobación definitiva de que la comenzó como ‘Operación Chamartín’ y ha terminado 26 años después como Madrid Nuevo Norte. PP, Más Madrid, Ciudadanos, PSOE y Vox, todos los partidos con representación en el Ayuntamiento de Madrid, votaron a favor del proyecto el 29 de julio de 2019.
Solo falta para su aprobación definitiva el visto bueno la Comunidad de Madrid, al ser la administración que debe autorizar finalmente la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) vigente. Todo parece indicar que las obras arrancarán a finales de 2020.
La constructora es propietaria del 25% de la promotora, Distrito Castellana Norte. BBVA posee, por ahora, el otro 75%. Diego Morín, analista de mercados de IG, indica que desde la fecha de aprobación del proyecto sus acciones aumentaron un 22%, quedándose muy cerca de los 10€ por título. “Si se confirma el comienzo de las obras, su acción podría dispararse para determinar nuevos máximos históricos”, ahonda. Las acciones de San José iniciaron el año a un precio de 4,60 euros y cerraron la sesión del 15 de octubre a 6,79 euros.
La importancia de este proyecto en el futuro próximo de San José reside, según Diego Morín, en que “le otorga prioridad en los encargos de la construcción de Madrid Nuevo Norte, un desarrollo urbanístico que traería un volumen de negocio superior a los 11.000 millones de euros, muy superior a la inversión inicial”.
Además de este principal motivo, Andrés Aragoneses, analista de Self Bank, argumenta que «los movimientos estratégicos de la compañía a partir de 2016, unido al buen momento de la construcción, ha revitalizado el valor de sus títulos, que se han multiplicado por tres en apenas 36 meses». «A base de hacer de nuevo las cosas “bien”, la constructora ha ido ganando cada vez más contratos y actualmente tiene proyectos por más de 2.000€ millones en cartera», aclara.
En el negocio internacional, Andrés Aragoneses hace hincapié en Abu Dhabi, «donde sus relaciones la prometen un sitio preferencial para la concesión de nuevos contratos, en un país en constante expansión. De hecho, más del 20% de sus ingresos proceden de este país.
Otro punto que valora el analista de Self Bank es su capacidad de generar flujo de caja. «Ha permitido que su apalancamiento se redujera un tercio hasta alcanzar un ratio de deuda neta/Ebitda de 2x, comparado con el ratio de 6x de 2016», expone.
No obstante, tras la subida fulgurante de la aprobación del proyecto, llegaron las caídas. Compra con el rumor y vende con la noticia es uno de los dichos más famosos del ámbito bursátil. En el caso de San José, desde los máximos en 9,12 euros marcados a finales de julio los títulos han retrocedido hasta dibujar un canal lateral en el rango de los 6,7 euros a la espera de nuevas noticias.
SAN JOSÉ BARRE A SUS COMPETIDORES EN BOLSA
De las empresas inmobiliarias que cotizan en el Ibex-35 o en el Mercado Continuo, San José es la que más ha subido en 2019. Las empresas que siguen la estela positiva de la compañía gallega son Colonial (+29,3%) y Merlin Properties (18,83%). En el lado opuesto, Quabit (-51,16%) y Metrovacesa (-25,88%) lideran las pérdidas entre enero y el 15 de octubre.
Bueno, Urbas ha incrementado su valor un 52,14%, pero como aclara el analista de IG, “podría considerarse un “chicharro” (valor que se ve expuesto a mucha volatilidad) por lo que invertir en ella conlleva un gran riesgo”. “El incremento en la cotización de empresas como Urbas se debe principalmente a que están en proceso de desarrollo y, por tanto, su finalidad ahora mismo es captar capital en bolsa”, explica Morín. “Lo hace a través de ampliaciones de capital mediante la emisión de acciones, ya que emitir bonos sería demasiado caro, porque el cupón que pagaría sería demasiado alto por la incertidumbre de la empresa”, concluye. Sergio Aragoneses indica sobre este valor que «la falta de liquidez, apenas mueve 25.000€ diarios, hace que podamos ver movimientos “extraños” en él, más allá de sus fundamentales, que siguen siendo algo flojos».
Según datos del Banco de España, en los siguientes meses se puede producir un enfriamiento en cuanto a la inversión en el sector. Sin embargo, para el 2020 se prevé un aumento de inversión al 3,8% mientras que caería posteriormente en 2021 (-2,8%). Por tanto, según Diego Morín, “lo mejor sería contar con una cartera bien diversificada, sin centralizarse en un único sector, aunque empresas del Ibex 35, como Colonial y Merlin Properties lideran actualmente las subidas anuales”.
Por su parte, Andrés Aragoneses indica que «los precios de la vivienda han subido sin parar desde el estallido de la crisis, por lo que habría que ser precavidos antes de decidir si posicionarse en el sector de la construcción o no«. «Eso no significa que tener ladrillo en cartera sea una mala opción», afirma. De hecho, expone, «el mercado se ha posicionado en que las socimis lo van a seguir haciendo bien, lo que explica la revalorización de Merlin o Colonial en lo que llevamos de año».
Por último, el analista de Self Bank considera que «unos tipos de interés bajos a largo plazo garantizan la financiación para nuevos proyectos, lo que podría ser un factor para que el precio de la vivienda mantenga la tendencia alcista».