El Gobierno resiste ante México y subraya la importancia de defender las instituciones

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha dejado claro que España no aceptará una representación de «cualquier otro nivel distinta a la del jefe de Estado» en eventos oficiales con México. Tras el desplante al Rey Felipe VI en la investidura de la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, Albares ha transmitido una firme protesta al embajador mexicano en Madrid y a su homóloga Alicia Bárcena.

El ministro español ha dejado en claro que, mientras él esté al frente de la diplomacia, la política exterior de España defenderá «siempre» a sus instituciones, empezando por la jefatura del Estado. Albares se ha negado a aceptar concesiones o gestos de «desagravio» por parte de México, reiterando que España busca mantener las «mejores relaciones» con su país hermano, pero sin ceder en la defensa de sus representantes institucionales.

Preocupación por la Situación en Venezuela

Por otra parte, Albares ha señalado que la crisis en Venezuela sigue siendo el «principal foco de preocupación» en América Latina para el Gobierno español. Si bien el ministro ha hecho un llamamiento al diálogo para alcanzar una «solución entre venezolanos y en Venezuela», ha dejado claro que el Ejecutivo de Nicolás Maduro no ha dado señales de moverse de sus posiciones desde las elecciones del 28 de julio.

Albares ha descartado que en el foro impulsado por Estados Unidos sobre la situación en Venezuela se haya planteado el reconocimiento de Edmundo González como presidente electo. No obstante, el jefe de la diplomacia española confía en que acabe imponiéndose «la voluntad democráticamente expresada por los venezolanos» en las urnas.

Preocupación por la Situación en Oriente Próximo

Por último, Albares ha expresado su preocupación por la grave situación en Oriente Próximo, donde ha hecho un llamamiento a evitar que la guerra sea «la única forma de relacionarse». El ministro ha reclamado un alto el fuego inmediato en la Franja de Gaza y la liberación de todos los rehenes en manos de Hamás, con el objetivo de avanzar hacia una solución de dos Estados entre Israel y Palestina.

En este sentido, Albares ha lamentado los bombardeos sobre el territorio libanés por parte de las fuerzas israelíes, que han dejado cientos de muertos. El ministro ha pedido al Gobierno iraní que ejerza «toda la contención e influencia posibles» para calmar la tensión en la región.