Carlos García Ciriza es el presidente de la Asociación Española de Empresas de Asesoramiento Financiero (Aseafi) y socio fundador de C2 Asesores Patrimoniales. Desde su punto de vista, la educación financiera es importante para fomentar las habilidades empresariales “sobre todo para aquel que tenga éxito, y gane dinero, sepa invertirlo después”.
¿Cómo definiría la situación financiera en España?
Creo que es una situación que, aunque ha evolucionado algo los últimos años, es mejorable. Sigue siendo deficiente. Conscientes de esta realidad, las autoridades financieras españolas (CNMV y Banco de España) llevan desarrollando desde 2008 un Plan de Educación Financiera, de concienciación a todos los niveles de la ciudadanía. Una tendencia a la que cada vez se están sumando más iniciativas privadas que comparten su conocimiento y su know-how. Por lo que la buena noticia es que, hoy en día, hay un acceso a contenidos casi ilimitado. Y muchas posibilidades para aprender a utilizarlo.
¿Cuáles son las principales reivindicaciones de Aseafi al respecto?
La educación financiera debería empezar en la escuela, debería haber asignaturas de finanzas en todos los programas educativos, así como en las carreras universitarias. Es importante recalcar que los beneficios de llevar una buena planificación financiera, como decimos en la jerga financiera, son suculentos, ya que son muy numerosos y de calidad. Está demostrado que los países más evolucionados son los que mayor cultura financiera tienen sus ciudadanos.
¿Qué aspectos son los más deficitarios entre la población respecto a la cultura financiera? ¿Cómo podrían mejorarse?
No hay aspecto que pueda destacar más que otro. En general, hay un desconocimiento de cómo funciona el sistema financiero y los mercados, así como de las características de los productos financieros y los riesgos asociados a los mismos.
Todo proyecto vital requiere estar respaldado por una planificación financiera adecuada. Cada persona, pareja o unidad familiar necesita de un plan financiero que, en primer lugar, les permite mantener su nivel de vida, hacer frente a los imprevistos y, en segundo lugar, poder progresar y alcanzar los objetivos vitales que tenga cada uno. Por último, asegurar los recursos necesarios para la etapa de la jubilación.
En materia emprendedora, ¿es la educación financiera el capítulo donde es necesario profundizar más para un buen desarrollo del proyecto? ¿Quedan demasiadas empresas en el camino por falta de educación financiera?
Sí. Hay que hacer lo necesario para mejorar la educación financiera. A lo largo de mi carrera profesional he conocido grandes profesionales en su ámbito que no han sabido invertir el dinero que ganaban ni han planificado correctamente su jubilación. Todos y cada uno de nosotros tenemos la obligación de entender y planificar adecuadamente nuestras finanzas.
Una formación financiera adecuada no sólo permite poder planificar y gestionar un patrimonio sino, además, comprender mejor lo que un asesor financiero hace por sus clientes. Para gestionar correctamente un patrimonio se necesitan unos conocimientos financieros que, a veces, no están al alcance de cualquiera, fundamentalmente por falta de tiempo. Si una persona tiene que desarrollar una carrera profesional se le exige mucho tiempo, o dedicarlo a su empresa, no tendrá tiempo para dedicarlo a sus finanzas, por eso es importante la figura de asesor financiero. Delegar la gestión de un patrimonio no es síntoma de debilidad, sino de lucidez.
¿Por qué la educación financiera es importante para fomentar las habilidades empresariales?
Porque todo aquel proyecto empresarial tiene un trasfondo financiero importante, pero, sobre todo, para que aquel que tenga éxito y gane dinero sepa invertirlo después. La educación financiera es importante para comprender bien en dónde se invierte un patrimonio. No es aconsejable invertir en algo que no se entiende bien, por lo que una formación financiera deficiente limita mucho las posibilidades de inversión. Es también labor de los asesores detectar este aspecto, para evitar malentendidos, cosa que ha ocurrido frecuentemente en nuestro país en el pasado reciente.
