Bayona, una villa marinera situada al sur de las Rías Baixas, en la provincia de Pontevedra, se ha consolidado como un destino preferido para muchos turistas durante el verano. Entre los visitantes de renombre, se encuentra la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, quien ha convertido esta localidad en su refugio personal durante los últimos años.
El encanto de Bayona, con sus paseos por el Monte Boi entre robles y pinos, la imponente presencia del Castillo de Monterreal y la réplica de la carabela La Pinta, que rememora la llegada de Cristóbal Colón a América, son algunos de los atractivos que convierten a esta villa en un punto de visita obligada en Galicia. Este municipio de apenas 12.000 habitantes no solo atrae a turistas anónimos, sino también a figuras públicas, como Yolanda Díaz, quien ha escogido este rincón gallego para desconectar del ajetreo político.
Aunque Yolanda Díaz es originaria de Ferrol y su familia reside en La Coruña, la vicepresidenta suele reservar unos días cada verano para disfrutar de Bayona, donde su familia posee una residencia. Este verano ha sido especialmente significativo para ella, pues es el primero que pasa en Bayona tras su separación de Andrés Meizoso. En esta ocasión, estuvo acompañada por su hija Carmela, con quien ha disfrutado de unos días de descanso.
Durante su estancia, Díaz se ha dejado ver en diversos establecimientos locales, siendo el Mesón Fidalgo uno de sus favoritos. Esta jamonería es conocida por sus raciones generosas y su servicio eficiente. En su última visita, la ministra vistió un atuendo informal compuesto por pantalones cortos negros, camisa del mismo color y zapatillas de la firma Adidas. A pesar de intentar pasar desapercibida, es frecuente que los habitantes y turistas la reconozcan. En esta ocasión, la vicepresidenta optó por una cena sencilla: pulpo, empanada, jamón y queso, rematando con una tarta de queso como postre. A menudo, se la escucha hablar en gallego, un gesto que refuerza su conexión con la tierra.
No todo han sido momentos tranquilos durante su estancia en Bayona. La vicepresidenta se vio envuelta en un pequeño incidente que ha generado comentarios negativos. Según testigos presenciales, un grupo de jóvenes se acercó a Díaz para solicitarle una foto. Sin embargo, la ministra, con un gesto serio, declinó la petición, explicando que estaba de vacaciones y no quería ser molestada. “Con mal gesto, les dijo que no quería, que ella estaba de vacaciones. No es normal”, relató una fuente al periódico El Debate. Este comportamiento contrasta con la actitud de otras figuras públicas, como el tenista Rafael Nadal, quien suele atender amablemente las peticiones de sus seguidores.
Yolanda Díaz ha disfrutado de unas largas vacaciones este verano, alejándose del foco mediático desde su última aparición pública el 29 de julio. En esa ocasión, participó en la firma de un acuerdo con Juan Carlos Lentijo, presidente del Consejo de Seguridad Nuclear, centrado en la vigilancia de los riesgos laborales asociados a la exposición al radón. Desde entonces, la vicepresidenta ha mantenido un perfil bajo, limitando sus comunicaciones a la red social X. Mientras tanto, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha regresado a la escena pública tras 12 días de ausencia, coincidiendo con la crisis provocada por Puigdemont.
Yolanda Díaz en Bayona
Pero Yolanda Díaz no es la única figura pública que disfruta de la tranquilidad de Bayona. La actriz gallega María Castro también ha sido vista en su tierra natal. Conocida por su participación en diversas series de televisión, Castro contrajo matrimonio en Bayona en 2018 con José Manuel Villalba. Este verano, la actriz ha compartido en sus redes sociales un vídeo de una de sus hijas jugando en la playa de Santa Marta, demostrando el fuerte vínculo que mantiene con su lugar de origen. Al igual que su familia hizo con ella, Castro se esfuerza en transmitir su amor por Bayona a sus dos hijas, Maia y Olivia.
Bayona continúa siendo un lugar de descanso y disfrute para aquellos que buscan alejarse de las presiones diarias, ya sean turistas anónimos o figuras públicas como Yolanda Díaz y María Castro. La villa marinera, con su historia, su paisaje y su gastronomía, sigue atrayendo a quienes buscan una experiencia auténtica en el corazón de Galicia.
