La aviación comercial en América Latina continúa expandiéndose, con Uruguay y Paraguay como protagonistas de una reciente alianza que abre nuevas oportunidades de conectividad entre ambos países. Este acuerdo, que permite a la aerolínea paraguaya Paranair operar vuelos regulares entre Asunción y destinos uruguayos, representa un hito en la reactivación del transporte aéreo en la región post-pandemia.
El Gobierno de Uruguay ha otorgado la autorización necesaria para que la aerolínea paraguaya Paranair comience a operar vuelos entre la capital de Paraguay, Asunción, y las ciudades uruguayas de Montevideo y Salto. Esta nueva ruta, que contará con 14 frecuencias semanales entre Montevideo y Asunción, representa un importante paso en la reactivación de la conectividad aérea uruguaya.
Según el subsecretario del Ministerio de Transporte de Uruguay, Juan José Olaizola, esta iniciativa es «muy importante» porque es el primer vuelo que se autoriza a una nueva terminal del Sistema Nacional de Aeropuertos Internacionales de Uruguay, en este caso, el aeropuerto de Salto. Esta ciudad del litoral norteño del país, que ahora contará con dos vuelos semanales con Montevideo, se beneficiará del mayor flujo de turistas paraguayos y uruguayos que podrán visitar sus atractivos termales y conocer la actividad productiva de la región.
El acuerdo entre Uruguay y Paraguay se enmarca en la política de «cielos abiertos» que Uruguay ha firmado con países vecinos como Argentina, Chile y ahora Paraguay. Asimismo, las autoridades uruguayas están trabajando para alcanzar un acuerdo similar con Brasil, con el objetivo de continuar ampliando las opciones de conectividad aérea en el interior del país.
OPORTUNIDADES PARA EL CRECIMIENTO DEL TRANSPORTE AÉREO
Esta nueva ruta aérea entre Paraguay y Uruguay no solo beneficia a los pasajeros, sino que también abre la puerta a nuevas oportunidades de desarrollo para el transporte aéreo en la región. Según Olaizola, la iniciativa «genera posibilidades para que otras aerolíneas encuentren nichos en el interior del país», y de hecho, ya existen «conversaciones para que más de una aerolínea llegue al aeropuerto binacional de Rivera».
La conectividad aérea es un factor clave para impulsar el crecimiento económico y el turismo en las diferentes regiones de un país. Al facilitar el desplazamiento de personas y mercancías, las nuevas rutas aéreas pueden fomentar la actividad comercial, atraer inversiones y promover el intercambio cultural entre las localidades conectadas.
Cabe destacar que esta iniciativa se produce en un contexto de recuperación del sector aéreo tras los desafíos planteados por la pandemia de COVID-19. La apertura de nuevas rutas internacionales entre Uruguay y Paraguay representa un hito en la reactivación de la movilidad y las oportunidades de negocios en ambos países.
EL IMPACTO DE LAS POLÍTICAS DE «CIELOS ABIERTOS»
La política de «cielos abiertos» implementada por Uruguay ha sido fundamental para facilitar este acuerdo con Paraguay y abrir la puerta a nuevas conexiones aéreas. Este enfoque, que promueve la liberalización del transporte aéreo internacional, ha demostrado ser una estrategia eficaz para incrementar la conectividad y fomentar la competencia entre aerolíneas.
Al firmar acuerdos de «cielos abiertos» con países vecinos, Uruguay ha logrado diversificar sus opciones de vuelo y brindar a los pasajeros mayores alternativas de destinos y frecuencias. Esto no solo beneficia a los viajeros, sino que también impulsa el desarrollo del turismo y el comercio entre las naciones involucradas.
Además, la cooperación regional en materia de transporte aéreo puede tener efectos positivos más amplios, como la integración económica, el intercambio cultural y la mejora de la competitividad de las empresas en los mercados internacionales. Estas políticas de «cielos abiertos» se perfilan como una estrategia clave para fortalecer la conectividad y la integración en América Latina.