En un escenario económico que se vuelve a normalizar, la energética francesa Engie ha logrado registrar beneficios netos atribuidos de 1.942 millones de euros en los primeros seis meses de 2024, una cifra que contrasta fuertemente con las pérdidas de 847 millones de euros del mismo período del año anterior. Este desempeño exitoso se enmarca en un contexto de mercado que evoluciona de manera favorable para la compañía.
Si bien la facturación de Engie se situó en 37.525 millones de euros, lo que representa una disminución del 20,2% en comparación con el mismo período de 2023, la empresa ha sabido optimizar su estructura de costos y mejorar su eficiencia operativa, lo que se ha traducido en una sólida generación de beneficios netos.
Diversificación y Equilibrio en las Divisiones de Negocio
La gestión y comercialización de energía aportó 15.573 millones de euros, un 27,5% menos, mientras que la división minorista generó 8.032 millones de euros, un 22,5% menos. Por otro lado, las soluciones energéticas y las redes contribuyeron con 4.917 millones y 3.555 millones de euros, respectivamente, mostrando una caída del 10,3% y 2,9% en comparación interanual.
El área de energías renovables generó 2.749 millones de euros, un 5,2% menos, y la de generación flexible unos 2.261 millones de euros, un 16,9% menos. La nuclear, por su parte, aportó 38 millones de euros, complementados por otros ingresos por 401 millones de euros.
Perspectivas Optimistas y Compromisos Financieros
La consejera delegada de Engie, Catherine MacGregor, ha adelantado que «en un mercado que vuelve a la normalidad, Engie ha vuelto a presentar unos resultados muy sólidos en el primer semestre, lo que nos permite elevar nuestras previsiones para todo el año 2024«.
En este sentido, Engie ha revisado al alza sus estimaciones para el conjunto de 2024, anticipando unos ingresos netos recurrentes de entre 5.000 y 5.600 millones de euros, superando los 4.200 y 4.800 millones de euros previstos anteriormente.
Además, la multinacional gala se ha comprometido a mantener un «rating potente de grado de inversión» y una ratio a largo plazo igual o inferior a 4x de deuda neta sobre el Ebitda. Igualmente, ha confirmado su política de dividendos, con una ratio de desembolso del 65% al 75% y un mínimo de 0,65 euros a abonar por acción entre 2024 y 2026.
