Skoda apuesta a que el Gobierno rechace la opa húngara sobre Talgo

Las noticias de esta semana han dejado heridos de muerte los intereses de Skoda por Talgo. La reacción de los inversores del fabricante español a una oferta que no espera conseguir todas las acciones de la empresa no ha sido demasiado amable, prefiriendo la opa propuesta desde la empresa húngara Magyar Vagon, pero para la compañía de origen checo queda una esperanza: la incomodidad demostrada desde el Gobierno de España con el hecho de que haya empresa con una relación tan cercana con el Gobierno del ultra húngaro Viktor Orbán. 

Con la aplicación de la ‘ley anti opa’ todavía guardada en el bolsillo, es posible que el Gobierno español pueda evitar la compra. Es una estrategia complicada, ya que, a pesar de las diferencias con el Gobierno húngaro, y las denuncias que este ha recibido por su cercanía a Vladímir Putin, sigue siendo un miembro de la Unión Europea. De hecho, en este momento, el propio Orbán ocupa la presidencia temporal del Consejo Europeo, lo que le hace incluso más poderoso de lo normal. 

EuropaPress 5226492 avril nuevo tren ave talgo 1 Merca2.es

Es una situación complicada, sobre todo porque desde la empresa constructora está claro que prefiere la oferta húngara. Es fácil entender, pues es una empresa que tiene experiencia directamente en el mundo de los ferrocarriles y que ha mejorado su capacidad industrial precisamente para así contar con capacidad responder a los pedidos pendientes de Talgo, que siguen acumulándose desde que empezó la situación. Son motivos fáciles de comprender y si no existieran las conexiones con un gobierno tan controvertido como el de Orbán, probablemente el acuerdo no tendría mayores problemas. 

SKODA ES UNA DE LAS ÚLTIMAS POSIBILIDADES DEL GOBIERNO

Lo cierto es que al Gobierno de España no le quedan muchas más opciones después de Skoda. Las empresas españolas no han mostrado interés en el momento y otros fabricantes de trenes europeos han mantenido la distancia del drama actual. Incluso a pesar de haber reclutado el apoyo de Criteria, que espera la llegada de un socio industrial, no han conseguido a nadie interesado en sumarse a los esfuerzos para evitar la opa, algo clave después que el ministro de Transportes, Óscar Puente, insistiera en varias declaraciones públicas que se haría todo lo posible para evitar que la compra de Talgo se materialice. 

TALGO

Pero con la oferta de Skoda siendo menos atractiva para los accionistas, el arma que les queda es aplicar la ley anti opa, aprobada durante la pandemia, argumentando que la constructora es una empresa estratégica. Es el motivo por el que la oferta checa no es por toda la empresa, pues permite al Gobierno el argumento de que el control de la empresa se mantiene en manos españolas, lo que tendrá que ser un argumento clave si se quiere rechazar la opa. 

Pero la realidad es que es necesario tener una buena relación con los inversores si se quiere mantener a Talgo en manos españolas. También si quieren seguir negociando con la empresa a futuro para seguir expandiendo el sistema de alta velocidad en el país, tienen que salir de esta situación sin pelearse del todo con la directiva de la empresa. También es cierto que los pendientes de la constructora con la propia Renfe son uno de los motivos clave que hace que la presencia de un socio industrial sea tan deseable. 

EL CASO DE TALGO SE SIGUE ESTIRANDO

Para el Gobierno, uno de sus objetivos iniciales, que la situación con la opa se resolviese antes del principio de la presidencia europea de Orban, ya no se ha conseguido, lo que ace que ahora el tema sea más complicada. En cualquier caso son pocas excusas las que quedan, incluso si desde el Gobierno se sigue intentando por lo menos alargar el proceso mientras se buscan opciones, es también evidente que no se puede seguir estirando el chicle eternamente. Pero si el interés de Skoda no cambia, los accionistas de Talgo, preferirán una opa con buen precio como la que ha presentado Magyar. 

En cualquier caso, los húngaros están dispuestos a pelear la opa en los tribunales. Han dado al Gobierno español hasta el 10 de agosto, tras lo cual han demostrado su disposición a llevar la lucha a los tribunales. Es una situación que todas las partes prefieren evitar, pero desde Talgo y Magyar Vagon se han mostrado dispuestos a asumirla con tal de que la opa llegue a buen puerto. Después de todo se trata tanto de una empresa realmente suculenta como de una oferta más que atractiva. 

Desde Magyar además han intentado, sin éxito, desmarcarse del Gobierno húngaro, asegurando que la presencia de dinero público en la inversión sólo está presente para la compra inicial y que no estarán presentes en el accionario.