Hasta un 4.570% más han incrementado su inversión en Easyjet los fondos de inversión españoles en lo que va de 2019. En concreto, la inversión en los dos primeros trimestres supera los 6,3 millones de euros frente los apenas 135.000 euros que mantenían el 30 de diciembre. La cantidad, además, tiene un nombre en particular: Ibercaja. La gestora de la firma aragonesa tiene tres de los cinco fondos que apuestan por la aerolínea, después de la entrada de Ibercaja Alpha e Ibercaja Crecimiento Dinámico.
El fuerte incremento en la cantidad invertida, además, sobresale debido a dos factores externos a los que se enfrenta la firma inglesa: por un lado, la posibilidad de un Brexit duro, que golpearía con fuerza a Easyjet, es cada vez mayor. Por otro lado, la guerra de precios y supervivencia que vive el sector, el lunes 23 anunciaba su quiebra Thomas Cook, que está castigando con especial virulencia a las operadoras de low cost que ha llevado a que la gran mayoría de gestores españoles hayan decidido cerrar posiciones en las mismas.
Los últimos datos de facturación de Easyjet desvelaron que la firma sigue siendo muy dependiente de la economía británica, en concreto, un 45% de sus ventas procedían de allí. La situación anterior es una de las grandes pegas que le ponen muchos analistas a la hora de valorar la compañía, puesto que en el país existe una incertidumbre muy grande. Aun así, las cifras no se resintieron en el último trimestre y logró un crecimiento del 8% en el número de pasajeros, un 10% entre trimestres, lo que le ayudó a mejorar sus cifras por pasajero un 0,7%, aunque muy lejos del derrumbe del 7,4% que mostró en el primer semestre en dicha partida.
Además, a la compañía inglesa le afecta la combativa evolución del sector: una guerra de precios que no la beneficia, puesto que es menos rentable que sus competidores al tener una estructura de costes fijos más alta que Ryanair o Wizz Air. Por otro lado, Easyjet ha entrado en un periodo de fuertes inversiones para mejorar sus sistemas y trato al cliente que le llevará un mayor gasto de capital y una reducción en los flujos de caja libre, por ejemplo, la última gran inversión fue en sistemas de IT que le permitan mejorar las ventas cruzadas.
La fuerte competitividad del sector, que tendrá fuertes efectos sobre beneficios y márgenes, ha echado hacía atrás a los gestores españoles respecto a la evolución de sus inversiones. Así, la ya en bancarrota Thomas Cook no contaba prácticamente con inversión de ningún gestor español después de que salieran entre el primero y segundo trimestre. Por otro lado, el dinero invertido en Norwegian (que ya ha negociado con los acreedores por su enorme volumen de deuda) por los instrumentos de ahorro español se ha reducido casi un 80% desde el tercer trimestre de 2018. También en el caso de Lufthansa, Ryanair o Wizz Air el capital mantenido ha caído con fuerza en los últimos trimestres.
Pese a lo anterior, los gestores españoles han optado por dar su apoyo a la revalorización del consorcio español e inglés, IAG. Los fondos han aumentado su inversión en la matriz de firmas como Iberia o Vueling en lo que va de año un 74% hasta superar los 160 millones de euros. La razón principal es que los analistas consideran que el castigo a la aerolínea, debido sobre todo al Brexit, es excesivo dado que sus cifras operativas son considerablemente mejores que el resto de competidores, aunque por el momento el valor seguirá castigado por la incertidumbre en Reino Unido.