Con la prórroga de un millonario pagaré que vencía el viernes pasado, Holaluz ha dado un paso de gigante en su lucha por esquivar el peor de los escenarios: el de su desaparición como mercantil. Fuentes cercanas a la compañía han asegurado a MERCA2 que la política financiera de la compañía, basada actualmente en la transformación de la deuda de corto a largo plazo, ha dado resultado; y que la posibilidad de un preconcurso de acreedores «no está sobre la mesa».
El pasado viernes 19 de julio, la comercializadora catalana anunció la renovación por dos años más de un pagaré de siete millones de euros, que vencía ese mismo día. Las nuevas condiciones fijan la amortización mediante nueve pagos y con importe creciente.
ADEMÁS DEL PAGARÉ DE SIETE MILLONES DE EUROS PRORROGADO POR DOS AÑOS, la compañía ya ha repagado este año pagarés por valor de CASI 20 ‘KILOS’
Esta decisión, explicó la compañía presidida por Carlota Pi, se enmarca en el proceso de reordenación de su deuda por el que ha contratado a PriceWaterhouseCoopers (PwC). De este modo, Holaluz «refuerza la solidez de su estructura financiera para llevar a cabo la ejecución de su plan de negocio».
Adicionalmente al pagaré de siete millones que se suscribió a principios de año y que acaba de renovarse, la compañía ya ha repagado este año pagarés por valor de 19,8 millones de euros.
HOLALUZ BATALLA POR SANEAR SUS CUENTAS
El pasado 1 de mayo, la comercializadora catalana se vio obligada a presentar sus resultados 2023 fuera de plazo y sin auditar en el BME Growth, índice bursátil en el que cotiza. El motivo por el que los resultados no contaban con una certificación profesional es que los fondos Axon y Geroa Pensoak, a la sazón accionistas mayoritarios de la compañía, votaron en contra de las cuentas, lo que, según informó la empresa, obligó al auditor a realizar trámites administrativos adicionales.
Los resultados netos de la comercializadora catalana reflejaban una catástrofe contable de proporciones devastadoras, con unas pérdidas de más de 26 millones de euros que multiplicaban por cinco los ya preocupantes ‘números rojos’ del ejercicio precedente. Esta cifra palidecía, no obstante, ante la deuda neta, que superaba con creces los 60 millones de euros.
Desde entonces, Holaluz ha protagonizado un auténtico maratón en busca de inversores que le saquen del atolladero. La comercializadora sigue negociando con varios actores públicos y privados, como el Instituto Catalán de Finanzas (ICF), así como con los «grandes bancos de España», como han asegurado a este medio las fuentes arriba mencionadas.
Holaluz ya ha obtenido 8,1 millones de euros de financiación adicional entre mayo y junio de 2024, gracias a una operación de financiación y A la venta de 800 préstamos de clientes
Holaluz ya ha obtenido 8,1 millones de euros de financiación adicional entre mayo y junio de 2024, gracias a una operación de financiación por cuatro millones de euros y la venta de 800 préstamos de clientes de su negocio de instalación de placas solares, por 4,1 millones de euros.
La firma catalana ha declarado que su deuda neta a 30 de abril era de 57,2 millones de euros, frente a los 65,4 millones de euros al término de 2023. Dicha deuda está compuesta por el pagaré de siete millones, préstamos bancarios y otros instrumentos de financiación de circulante (pólizas, confirmings, etc.). La mayoría de los instrumentos de financiación bancaria, según la información facilitada por la empresa, están avalados por el ICO, con tipos de interés favorables.
FUNDADORES CONTRA FONDOS
El complejo proceso de saneamiento financiero de Holaluz está teniendo lugar con el ruido de fondo de la guerra sin cuartel en el seno del accionariado de la empresa.
Los fondos Axon ICT III, F.C.R y Geroa Pentsioak EPSV, que poseen un 16,80% y un 6,68%, respectivamente, del capital de la fotovoltaica, han sido una piedra en el zapato para la directiva desde el mismo inicio de la crisis. Desde el principio conspiraron para destituir a Carlota Pi y a su equipo, culpándoles del agujero en las cuentas que les ha puesto al borde del concurso de acreedores.
Pi, junto con los otros dos fundadores –Ferran Nogué y Oriol Vila– inició su contraofensiva el pasado 28 de junio, con la presentación de una acción social de responsabilidad contra Axon y Geroa. Con esta medida, apartó del consejo de administración a los representantes de los fondos, Alfonso Juan de León Castillejo y Jordan Sáenz.
PI Y LOS FUNDADORES DE HOLALUZ HAN APARTADO A AXON Y GEROA DEL CONSEJO Y HAN ROTO EL CONTRATO ENTRE ACCIONISTAS QUE LES VINCULABA A ELLOS
Los fundadores de Holaluz justificaron la acción de responsabilidad social contra los fondos en «diversas actuaciones contrarias a su deber de diligencia y lealtad con la empresa». Concretamente, «el consejero Alfonso Juan de León Castillejo (en representación de Axon Capital) y el consejero Jordan Sáenz (en representación de Geroa Pentsioak E.P.S.V de Empleo) decidieron, sin fundamento alguno, no votar a favor de la formulación de cuentas sin salvedades, hecho que provocó la suspensión de la cotización de la acción».
El ‘jaque mate’ de Pi y su bando llegó el pasado miércoles 3 de julio, cuando los socios fundadores rompieron unilateralmente el contrato entre accionistas que les vinculaba a Axon y Geroa.