La Cámara de Comercio de China para la Importación y Exportación de Maquinaria y Productos Electrónicos (CCCME), que representa a una docena de fabricantes de automóviles chinos, ha solicitado a la Comisión Europea que «corrija» sus investigaciones sobre los subsidios estatales de Pekín a la producción de vehículos eléctricos.
Según la organización, la evaluación preliminar del Ejecutivo comunitario de imponer aranceles a la importación de los automóviles eléctricos chinos es incompatible con las normas de la Unión Europea y de la Organización Mundial del Comercio.
Preocupación de la Industria Automotriz China
El vicepresidente de la CCCME, Shi Yonghong, ha expresado la preocupación de la industria automotriz china, asegurando que «Estamos muy preocupados. Instamos a la Comisión a que corrija estos hallazgos y ponga fin a la investigación (sobre los subsidios a los vehículos eléctricos chinos)».
La organización considera que las pérdidas económicas de la industria del automóvil europeo de estas últimas décadas no han sido provocadas por la llegada de la competencia China y denuncia que la investigación europea ha estado «plagada» de anomalías de procedimiento.
Búsqueda de una Solución Equilibrada
Los fabricantes de automóviles chinos quieren que Bruselas y Pekín negocien una solución «equilibrada» entre unos aranceles como los impuestos por los europeos del 20% y la intención china de que no se aplique ninguna normativa. Según el portavoz de la asociación, «Creo que esto es de gran interés para los Estados miembros porque muchos de ellos esperan inversiones de China».
Por el momento, los aranceles europeos son provisionales y habrá que esperar a noviembre cuando los jefes de Estado y de Gobierno de los diferentes países se pronuncien para conocer si las trabas comerciales con la industria automovilística china serán permanentes o no.
