Es posible afirmar que OpenAI, para bien o para mal, es una de las grandes responsables del avance desenfrenado del que viene siendo protagonista la inteligencia artificial (IA) de unos años hacia acá. Desde herramientas que leen y responden preguntas sobre archivos PDF, hasta robots humanoides que prometen reemplazar al ser humano en labores físicas, es lo que nos han dejado las innovaciones relacionadas con este tipo de tecnologías durante el último tiempo.
No obstante, todos estos grandes avances han venido acompañados por un mar de dudas acerca del respeto hacia la privacidad de los usuarios y el alcance extralimitado y fuera de todo control que podrían protagonizar diferentes herramientas de IA. Por este tipo de interrogantes y riesgos, una cantidad significativa de empleados de empresas como OpenAI han renunciado durante los últimos meses, algunos de ellos dejándonos declaraciones muy interesantes e incluso, preocupantes al respecto.
1OpenAI es el Titanic del mundo tecnológico
Debido a la exclusión de todo tipo de parámetros de seguridad con el único propósito de sacar versiones cada vez más potentes (y peligrosas) de herramientas de inteligencia artificial, exempleados como William Saunders han renunciado a OpenAI, negándose a ser partícipes de un desarrollo desenfrenado y sin escrúpulos de estas tecnologías.
Hace poco Saunders estuvo como invitado en el podcast de Alex Kantrowitz, hablando sobre su experiencia trabajando para una compañía tan importante como OpenAI y contando los motivos que hubo detrás de su renuncia y cuáles son los problemas que, según él, debería resolver la empresa antes de seguir por el camino que va.
«Realmente no quería terminar trabajando para el Titanic de la IA, y por eso renuncié. Durante mis tres años en OpenAI, a veces me preguntaba: ¿el camino que está siguiendo OpenAI se parece más al programa Apolo o al Titanic?», afirma el extrabajador de la firma propietaria de ChatGPT, haciendo una comparación más que válida entre dos empresas que, para él, cometieron el mismo error: querer productos nuevos con rapidez sin tener en cuenta protocolos de seguridad antes de lanzarlos.